Nicolás Maduro aspira a un tercer periodo presidencial.
Aton
A poco más de un mes de la realización de las elecciones presidenciales de Venezuela, el Presidente Nicolás Maduro acusó -nuevamente- que está siendo perseguido. Esta vez, los reclamos escalaron y el Mandatario denunció que la oposición tendría sicarios en el país, con el objetivo de atacarlo en medio de la campaña política que está en marcha y en la que el líder chavista intentará lograr un tercer sexenio en el poder.
No es la primera vez que Maduro hace este tipo de acusaciones. Desde que llegó al poder, el líder venezolano ha denunciado más de 30 planes en su contra para asesinarlo, todos siempre vinculados a la oposición, lo que ha significado el encarcelamiento y exilio de decenas de políticos.
Así las cosas, el Presidente aseguró el domingo, sin mostrar pruebas, que detrás de estos planes se encuentran los ex alcaldes Leopoldo López y Antonio Ledezma, además del ex presidente del Parlamento, Julio Borges. Estas tres personas fueron exiliadas y acusadas por la Justicia venezolana de conspirar contra la dictadura.
No se quedó ahí. El Presidente venezolano también hizo responsable a la líder opositora, María Corina Machado, quien está realizando una gira política por Venezuela promoviendo la candidatura presidencial del candidato a quien respalda, el ex embajador Edmundo González, de cara a las elecciones del 28 de julio.
Su inclinación por González se dio luego de que ni Machado ni su sustituta, Corina Yoris, lograran inscribir sus candidaturas.
Sería por estas "razones de seguridad" por las que el Mandatario no ha anunciado las fechas de sus actos de campaña ni los lugares en los que estará. De esta forma, todo aquel que asista a estos eventos se enterará "de sorpresa".
"Mis llegadas en todos lados tienen que ser de sorpresa, el pueblo cuidándome y los equipos de seguridad haciendo un buen trabajo, como lo están haciendo. En manos de Dios, voy rumbo a los destinos para cumplir mi misión aquí en la Tierra", sostuvo Maduro.
