Joe Biden encendió las alarmas tras su performance en el debate contra Donald Trump.
AFP
En el debate del jueves, el Presidente de Estados Unidos,
Joe Biden, no pudo contrarrestar las críticas provenientes del Partido Republicano, que ponían en duda su capacidad argumentativa y su destreza discursiva por su avanzada edad (81 años). En un cara a cara histórico con su principal rival, el ex mandatario
Donald Trump, muchos se preguntaron si sería posible y qué pasaría en caso de que el demócrata renunciara a su candidatura.
En los primeros minutos del debate, los funcionarios intentaron calmar las aguas y proteger la imagen del líder demócrata al decir que estaba atravesando un resfriado. Pero con el avance de cada bloque, el pánico comenzó a sentirse detrás de escena. Frente a un Trump agresivo, pero más controlado que habitualmente, Biden quedaba rezagado, inclusive en sus temas fuertes como el derecho al aborto.
Los medios estadounidenses abrieron este viernes con la pregunta que intentan develar todos los demócratas y los votantes estadounidenses:
¿Podría Biden abandonar su carrera para la reelección presidencial?
Ese único interrogante abre un aluvión de otras dudas extras, como quién podría ser un virtual reemplazante de Biden, cómo quedaría Estados Unidos frente al mundo si el presidente renuncia a la reelección y cómo recibirían los electores esta noticia.
Lo cierto es que, si los demócratas impulsan a un nuevo aspirante principal, no sería un proceso sencillo de aquí a noviembre.
Cómo procede la renuncia y quiénes suenan como reemplazante
Joe Biden ganó ampliamente las elecciones primarias demócratas y en los caucus, por lo que acumula 3.894 delegados comprometidos a respaldar su candidatura en la próxima Convención Nacional Demócrata, a realizarse entre el 19 y el 22 de agosto.
Detrás del Mandatario, los otros candidatos que se presentaron para el Partido Demócrata y le hicieron frente en los comicios internos ni siquiera alcanzan la centena de delegados en conjunto. Es por eso que, con una abrumadora mayoría, Biden es el virtual candidato oficialista, no por nada se presentó en el debate del jueves.
El punto clave en esta cuestión es que el sistema electoral de las primarias estadounidenses da el poder a los votantes para que elijan quiénes quieren representarlos. Por lo que si Biden renuncia a su candidatura,
el Partido Demócrata tendría que decidir nuevos candidatos, contradiciendo los resultados de las primarias.
Además, si el principal candidato abandona la campaña, serían los delegados individuales los que definan el nuevo aspirante, y el Partido Demócrata aún no ha definido quiénes son estos delegados. El Comité Nacional Demócrata tiene facultades para reemplazar una vacante libre antes de noviembre, pero el presidente del partido tendrá que consultar a los gobernadores y a los líderes del Congreso.
Pero en caso de que todo lo anterior suceda, tampoco queda claro quién podría ser un sustituto efectivo. La vicepresidenta Kamala Harris sería una de las principales aspirantes a sumarse a la carrera por mantener la Casa Blanca. También podría ser el gobernador de California, Gavin Newsom, un fiel defensor de Joe Biden.
En la redes sociales, varios usuarios fantasearon con la idea de que se candidateara ante una hipotética retirada de Biden la ex primera dama estadounidense Michelle Obama, abogada y activista que aseguró en entrevistas anteriores que nunca entraría en la carrera presidencial.
