Continúan las repercusiones de la tormenta Boris en diversos países de Europa Central. Las víctimas fatales subieron a 19 este martes, siendo las naciones más afectadas Austria, República Checa, Hungría, Rumania y Eslovaquia. Barrios enteros se encuentran completamente sumergidos, donde el nivel del agua supera los cinco metros.
Las precipitaciones de esta devastadora tormenta han superado hasta en cinco veces el promedio que se esperaba para todo el mes de septiembre, en solo cuatro días en algunas de las zonas afectadas.
El río Danubio -uno de los más importantes de Europa que pasa o limita 10 países- continúa creciendo en Eslovaquia y Hungría, donde las calles colaterales que corresponden a los cascos antiguos de algunas ciudades, como Bratislava, se encuentran completamente inundadas. En otras ciudades históricas, como Visegrád y Szentendre, al norte de Budapest, se instalaron presas móviles de emergencia para controlar el flujo de agua.
En la capital húngara, el nivel del río aumentan un metro aproximadamente cada 24 horas, según informaron desde el ayuntamiento de Budapest. La crítica situación obligó a que las líneas de tranvía y las carreteras que van a lo largo del río -además de la isla Margarita- fueran cerradas.
En Alemania, el río Elba crece de manera constante. Las autoridades aplicaron muros de protección para intentar evitar la inundación del casco antiguo de Dresde. Sin embargo, se espera que el nivel del río continúe aumentando, llegando a su máximo este miércoles.
El primer ministro de República Checa, Petr Fiala, informó de que son ocho los ciudadanos que permanecen desaparecidos a causa de la tormenta, a lo que se suman los más de 13 mil evacuados hasta este martes, además de los miles de hogares que continúan sin electricidad.
Una de las zonas más afectadas es la frontera entre Polonia y República Checa, donde son más de dos mil los voluntarios que pasaron la noche transportando "de mano en mano" sacos de arena para levantar un muro que bloquee el terraplén de 250 metros que comunica, la principal avenida de la ciudad polaca, Nysa, con el puente Kosciuszko, bajo el que pasa el río Nysa Klodzka, tras el desborde del embalse.
La situación es crítica, el alcalde de la ciudad, Kordian Kolbiarz, -quien paso la noche junto a los voluntarios intentando contener el dique- solicitó la evacuación de todos los vecinos, asegurando que se trató de la "noche más importante en la historia", ya que está en juego "su supervivencia".
El jefe nacional de Bomberos, Mariusz Feltynowski, informó que además de los esfuerzos realizados por voluntarios para sellar el dique, también hubo presencia de helicópteros militares que arrojaban sacos de arena.
La ciudad Wroclaw, también en Polonia, se prepara para el eventual desborde del río Óder, del cual se prevé que alcance su nivel más alto este miércoles.
Se prohíbe la navegación en el río Danubio en Austria
Las intensas precipitaciones y en gran incremento en el nivel del río Danubio llevó a las autoridades austriacas a cerrar, este martes, el tráfico marítimo en todo el caudal. Medida que no se levantará hasta que la seguridad se encuentre garantizada nuevamente, informaron.
Si bien el nivel del río ha comenzado a bajar, la llegada de más agua al derretirse la nieve debido a las altas temperaturas podría significar un nuevo aumento del caudal del Danubio, el que discurre por más de ocho mil kilómetros entre Alemania y su desembocadura en el Mar Negro, entre Ucrania y Rumanía.
Desde el Ministerio de Transporte de Austria informaron que "actualmente no es posible establecer una fecha previsible para el levantamiento de los cierres a lo largo del Danubio", por lo que la navegación, tanto de barcos con pasajeros como los de carga, está completamente suspendida, debido al peligro que suponen las maniobras y su desembarco.
Tormenta Boris se movería a Italia
Si bien se espera que el evento meteorológico comience a mejorar de manera constante la noche de este martes, se pronostica que la tormenta Boris se mueva -nuevamente- hacia el norte de Italia, llegando a dicho país en dos días, luego de haber rozado la península el jueves pasado.
Italia ya se encuentra en alerta máxima. La región de Emilia-Romaña, se prepara para la caída de entre 100 a 150 milímetros de precipitaciones, con los escenarios previos de sus afectaciones en los países de Europa central.
Según explicó el meteorólogo italiano Lorenzo Tedici, "el Adriático inusualmente cálido generará tormentas en todos los Apeninos adriáticos a partir del jueves y hasta el fin de semana", agregando que aún se esperan "más fenómenos meteorológicos extremos".