La policía de Brandeburgo (este) abrió investigaciones por una canción presuntamente racista que se cantó en la fiesta electoral de la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) tras los comicios regionales en los que esa agrupación obtuvo el segundo lugar ligeramente por debajo del Partido Socialdemócrata (SPD).
"La canción de las deportaciones" fue producida por la organización de juventudes de AfD, la Joven Alternativa (JA), con ayuda de la inteligencia artificial.
Mientras se oía la canción, y algunas asistentes a la fiesta bailaban, un militante levantaba una pancarta en donde pedía
"Deportar a millones".
El jefe de AfD en Brandeburgo, René Springer, le restó importancia a lo sucedido y dijo que "dentro de todos los partidos, las organizaciones juveniles suelen experimentar hasta dónde pueden llegar".
El político verde y presidente de la Asociación Germano-Israelí, Volker Beck, anunció que había presentado una demanda penal contra la canción.
"Los inmigrantes y los refugiados son parte de la población.
Lo que se pide en la canción fomenta el odio contra ellos y llama a la violencia o a medidas arbitrarias como la deportación de millones. He denunciado a los responsables con base en el artículo 130 del Código Penal", dijo Beck en X.
La Oficina para la Protección de la Constitución en Brandeburgo considera a la AfD como caso de sospecha de extremismo de derecha, lo que implica que el partido puede ser observado con recursos de los servicios secretos.
Seis diputados de la AfD son considerados incluso como "con seguridad de extrema derecha" y entre ellos el cabeza de lista para las regionales Hans Christoph Berndt.