"Queremos saber finalmente dónde está el PC, porque lo vemos acá en La Moneda, pero también lo vemos en las calles agrediendo a la gente", sostuvo el senador.
Álex Valdés, El Mercurio
SANTIAGO.- El presidente de la UDI, Hernán Larraín, exigió este lunes al Gobierno que otorgue mayores garantías a sus militantes, tras
las agresiones que enfrentaron esta mañana varios parlamentarios del gremialismo que fueron a entregar su apoyo a los miembros de la colectividad que están siendo formalizados por el caso Penta.
Tras sostener una breve reunión con el subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, en La Moneda, el líder del partido opositor dijo que la presencia de los legisladores en el Centro de Justicia "ha estado manchada por la agresión que hemos vivido de parte de manos de los infantiles de izquierda, anárquicos, del Frente Manuel Rodríguez y también del PC".
"Queremos saber finalmente dónde está el PC, porque lo vemos acá en La Moneda, pero también lo vemos en las calles agrediendo a la gente que va a acompañar pacíficamente a quienes están pasando un mal momento", agregó.
En esa línea, Larraín sostuvo que "ese nivel de agresión no puede existir y le hemos reclamado al Gobierno que ha garantizado la tranquilidad en estos hechos, que ese elemento no se ha cumplido".
"Acabo de volver a hablar con el subsecretario reclamando porque un grupo de jóvenes de la UDI no puede salir de un estacionamiento porque lo están esperando elementos de la Jota (Juventudes Comunistas)", enfatizó.
Por ello, insistió en que "ese nivel de violencia que utilizan los comunistas no lo queremos en Chile. Queremos además que el PC se defina, si va a estar por la tranquilidad, por la democracia, por la gobernabilidad desde La Moneda, o si van a estar en la calles, porque en ambos me parece que no pueden estar y el Gobierno así lo debe entender".
Consultado sobre si la presencia de diputados como Ernesto Silva, María José Hoffmann y Patricio Melero, entre otros, es una muestra del apoyo institucional hacia los militantes formalizados, el senador contestó que "esta audiencia de formalización se refiere a personas, que son muy queridas y en cuyas responsabilidades tenemos plena confianza. Por lo tanto, no creemos que sea una responsabilidad institucional y por eso no nos hemos hecho partícipes de este acto".
"Sin embargo, eso no significa que no puedan ir otras personas que así lo estimen conveniente, porque vivimos en un país libre en que precisamente los partidos no tienen órdenes para que sus militantes hagan como quieren sus directivas", concluyó.
Apoyo desde Renovación Nacional
En tanto, el secretario general de RN, Mario Desbordes, criticó en duros términos la violencia con que fueron recibidos en el Centro de Justicia los militantes y parlamentarios de la UDI que fueron a entregar su apoyo a los miembros del gremialismo.
Al respecto, el dirigente aseguró que "transformar esto en un circo habla mal de la gestión del Poder Judicial que debió haberse preocupado de que se adoptaran las medidas para que esto no ocurriera".
En ese contexto, lamentó la diferencia de trato que a su juicio han tenido los políticos de la Nueva Mayoría que han estado involucrados en casos de financiamiento irregular de campañas políticas, ejemplificando con la forma en que el Ministerio Público recibió al ex ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, en el marco del caso SQM.
"Ya en las declaraciones que prestaron los parlamentarios (de la Alianza) fueron agredidas varias personas, a diferencia de otros personeros que son del Gobierno que declaran entre gallos y medianoche, calladitos, con un cafecito y con mucha comodidad".
Según Desbordes, "a la gente nuestra la han sometido a un verdadero linchamiento público y eso no me parece correcto".
Consultado sobre la postura que RN asumirá ante el ex diputado Alberto Cardemil, explicó que "nosotros hemos entendido que institucionalmente no corresponde que el partido esté presente, pese a la buena voluntad que tenemos con Alberto", ello porque "se podría mal interpretar. No estamos por hacer señales que alguien podría entender como una presión a un tribunal, así que por ningún motivo RN va a participar institucionalmente pese a los afectos y la buena voluntad que tenemos por Alberto".
Por su parte, el senador Alberto Espina (RN) dijo que "las personas son libres de ir a ver las audiencias de formalización según lo estimen conveniente".
"Quiero señalar que la formalización es un acto administrativo por el cual el fiscal dice que va a iniciar la formalización en contra de una persona determinada, eso significa que el tribunal tiene que decretar un plazo de investigación y posteriormente viene la parte dura que es finalmente si el tribunal acusa o no".
Y detalló que "esto es una etapa de investigación, que la fiscalía actúe con objetividad, que lo haga con acuciosidad y que le permita a quienes están imputados defenderse, porque podría ocurrir mañana que algunos de los imputados terminar inocente o alguno que hoy es inocente terminar imputado, entonces creo que en eso hay que ser cuidadosos. Cuando se decía que en este país habían intocables resultó que no es verdad".
En tanto, la diputada y vicepresidente de RN, Paulina Núñez, reiteró que "todo aquel que resulte condenado, va a ser expulsado del partido".
"Nosotros desde el día uno tomamos la decisión como partido que todo militante que fuera formalizado tenía que ser suspendido de su militancia y algunos lo han hecho voluntariamente y todo aquel que resulte condenado va a ser expulsado del partido".
"La UDI ha tomado otra definición, muchas veces argumentando que esa decisión es por apoyar a los suyos, pero creemos que hoy lo que se requiere son muestras claras, señales concretas, aquellos que estamos ejerciendo cargos en el Parlamento también con la mayor diligencia para que aquellos proyectos que vengan a dar una solución o abrir en la ventana puedan también aprobarse prontamente".
