Los arrestos fueron practicados por efectivos de la Fuerza de Tarea de la policía civil.
LUN (Archivo).
El ataque se produjo el 24 de noviembre, cuando un grupo de sujetos, vestidos con overoles salió desde las dependencias de Universidad Academia de Humanismo Cristiano (UAHC) -ubicadas a pocos metros del recinto policial- y lanzaron bombas molotov contra el frontis del lugar de calle Condell.
Los antisociales también bloquearon las salidas con cadenas y candados para evitar que los funcionarios salieran de la unidad policial, mientras ellos lanzaban los artefactos incendiarios, resultando tres de los efectivos con diversas heridas y el automóvil de uno de ellos destruido por la acción del fuego.
El hecho fue condenado por las autoridades que incluso presentaron querellas contra quienes resultaran responsables, mientras que, a su vez, puso en entredicho a los estudiantes de la UAHC, debido a que los agresores se escondieron al interior del campus para luego escapar.
Luego del ataque, la Brigada de Homicidios fue cambiada a un recinto ubicado en la calle Williams Rebolledo de Ñuñoa, movimiento que según se informó en la época estaba siendo gestionado antes del violento hecho, que incluso fue calificado como un posible "delito terrorista" por un fiscal.
Hoy, el edificio es ocupado por los funcionarios de la Brigada de Derechos Humanos de la institución.
Según se informó a Emol, los individuos fueron arrestados tras una intensa investigación de los efectivos de la unidad denominada "Fuerza de Tarea de Delitos Complejos", quienes también indagan hechos similares contra buses del Transantiago.
Tras su arresto, los individuos fueron trasladados al cuartel Independencia de la PDI, donde fueron interrogados, y esta mañana serán puestos a disposición de la fiscal preferente Luz Gavilán de la zona metropolitana Oriente para su formalización.