Con la presencia de la Presidenta Michelle Bachelet, los titulares de la Cámara, Marco Antonio Núñez (PPD) y del Senado, Patricio Walker (DC), realizaron la primera cuenta pública del Congreso.
Álex Moreno, El Mercurio.SANTIAGO.- Con la presencia de la Presidenta Michelle Bachelet, los titulares de la Cámara, Marco Antonio Núñez (PPD) y del Senado, Patricio Walker (DC), realizaron este martes la primera cuenta pública del Congreso Nacional en los 204 años de vida de la institución, ocasión en que ambos pidieron a la Mandataria congelar las dietas parlamentarias.
"Los desafíos para este nuevo año son entonces enormes, comenzando por nosotros mismos, que debemos lograr un acuerdo para que el Consejo Resolutivo de Asignaciones Parlamentarias, órgano externo e independiente, proponga al Ejecutivo que en el proyecto de ley de reajuste del sector público se congele nuestra dieta y, ojalá, la de todos los altos cargos de la administración del Estado", expresó el diputado Núñez.
La solicitud fue compartida por el senador Walker, quien más tarde durante su discurso detalló que la corporación que preside aprobó un proyecto de acuerdo en la misma línea "para así poner un gesto concreto de austeridad en nuestro país".
Núñez llama "a no hacerse parte nunca más de malas prácticas"
La ceremonia que comenzó al mediodía en el Salón de Honor del Congreso Nacional en Valparaíso, partió con la presentación de un video que daba cuenta de la historia y el trabajo de ambas Cámaras, luego se dio inicio al balance de la gestión legislativa comprendido en el periodo entre el 1 junio del 2014 y el 30 de junio del 2015.
El primero en tomar la palabra fue el diputado Núñez, quien partió señalando que una democracia activa "requiere instituciones y representantes íntegros, sujetos a los mayores estándares de control posibles".
A la vez que aludió a la existencia de una pérdida de confianza de la ciudadanía en las distintas instituciones, siendo éste un fenómeno mundial del que Chile no está ajeno, opinión que más tarde fue reforzada por el senador Walker.
En ese sentido, Núñez manifestó que "en asuntos de probidad en la Cámara de Diputados tenemos una obligación mayor a la de cualquier otra entidad pública, eso es que nos corresponde fiscalizar los actos de los organismos del Estado".
Asimismo, el diputado manifestó que ante una ciudadanía "empoderada" que a veces se vuelca a las calles "para exigir los cambios necesarios", están tratando de canalizar de manera institucional sus pedidos en "leyes justas".
Junto a esto, destacó la aprobación de proyectos de ley como los que dotan de autonomía al Servel y al Consejo Nacional de Televisión, el proyecto de fortalecimiento y transparencia de la democracia, marcando en este último punto la necesidad de regular la relación entre el dinero y la política, entre otras.
"El financiamiento de nuestras actividades de campaña debe ser fundamentalmente público, sin ninguna posibilidad de que lo realicen empresas que nos endeuden ni literal ni simbólicamente con sus intereses particulares", dijo tajante a sus pares legisladores.
Con ello, Núñez enumeró los avances que en el último año ha conseguido la Cámara ante el despacho de proyectos sobre educación o en lo que respecta a la reforma tributaria. Pero también dio cuenta de iniciativas pendientes con reformas centrales; como la constitucional, la laboral y en materia de salud.
Al cerrar su intervención, el presidente de la Cámara de Diputados recalcó que "el aporte de los parlamentarios para superar esta crisis de confianza no puede ser sólo legislar de manera expedita las leyes de probidad. También debe existir un compromiso personal y colectivo para dar el ejemplo y no hacerse parte nunca más de las malas prácticas que socavan y amenazan destruir nuestra democracia".
Walker: "Es la hora de pasar de los lamentos a la acción"
Tras la presentación de una serie de cifras conjuntas sobre la gestión de la labor realizada por el Parlamento durante el último periodo, el presidente del Senado dio inicio a su discurso recordando que esta primera cuenta pública del Congreso se desarrolla en un "contexto muy particular".
Acto seguido, Walker aludió a la crisis de confianza que "hoy afecta a la política, a las grandes empresas y a las instituciones en general", añadiendo que no basta con quedarse en el diagnóstico, pues "si somos parte del problema, tenemos que ser parte de la solución".
"Es la hora de actuar, de aprovechar esta crisis de confianza como una oportunidad; una oportunidad para contar lo que hacemos, una oportunidad para enmendar aquello que tengamos que corregir; una oportunidad para intentar lograr empatía con las demandas de la ciudadanía y, hay que decirlo, una oportunidad para hacer cambios importantes", precisó.
Bajo este contexto, el titular de la Cámara Alta declaró que "la ciudadanía tiene mucho que decir; tiene opinión, siente desencanto, pero también tiene esperanza en Chile. En este escenario de cambio, los actores políticos debemos desarrollar una actitud de escucha: este es un tiempo de oír. Es nuestro tiempo de oír". Y agregó que cuando la ciudadanía es escuchada y eso se ve reflejado en el trabajo legislativo, es también valorado por la población.
"Hemos vivido tiempos complejos. Reconozco que muchas veces no hemos estado a la altura de lo que la ciudadanía esperaba de nosotros. En el campo político y empresarial se han evidenciado prácticas que estamos decididos a erradicar. Lo que ayer era tolerado, hoy ya no es aceptado. Las exigencias en materia de probidad y transparencia hoy son mucho mayores que en el pasado. Es la hora de pasar de los lamentos a la acción", sentenció Walker.
De esta forma, el presidente del Senado enumeró diversas medidas que la corporación espera aplicar para modernizar el proceso de generación de leyes, así como también variadas reformas constitucionales, legales y reglamentarias para avanzar en transparencia y probidad.
Al mismo tiempo que recordó otras tantas iniciativas que ya han sido aprobadas por la Cámara Baja y que avanzan en éstas materias relacionadas con el principio de Probidad en la Función Pública, la pérdida del escaño ante irregularidades, entre otras.
"Si hacemos los cambios que el país exige, vamos a tener una oportunidad inmejorable para recuperar la confianza de la ciudadanía. Sabemos que no es fácil. Por lo mismo, se requiere, decisión, coraje, acciones concretas, perseverancia y sobre todo mucha consistencia", manifestó.
No obstante, Walker hizo hincapié en que "cualquier esfuerzo que se haga, por valioso que sea, será vano si algunos integrantes de nuestras propias instituciones privilegian sus agendas particulares por sobre la acción colectiva. Quienes lanzan acusaciones de manera genérica, irresponsable y gratuita sólo generan daño y desprestigio. Por ese camino, no existe ninguna, pero ninguna posibilidad de recuperar las confianzas".
Finalmente, el presidente del Senado –al igual que lo hizo el titular de la Cámara- destacó el rol que cumple el Parlamento actualmente, asegurando que sin esta institución "no hay democracia, sin parlamentarios, gobiernan los dictadores a su total arbitrio".