Esta vez la pena considera que el sujeto no podrá optar a ningún beneficio.
El Mercurio (archivo)
SANTIAGO.- A 15 de años y un día de cárcel fue condenado el hombre acusado de violar a sus dos hijas entre los años 2012 y 2013 en Puerto Montt, cuando las niñas tenían ocho años de edad.
La fiscalía de Los Lagos logró que se acogieran las agravantes de parentesco además de que el sujeto cometió los abusos mientras cumplía una condena por robo con violencia y gozaba de beneficios penitenciarios.
"En definitiva es una pena que se condice también con el daño causado a las víctimas", señaló el fiscal Jaime Rojas Díaz, quien presentó ante el tribunal oral de Puerto Montt las pruebas y testimonios reunidos durante la etapa investigativa de este caso.
Al mismo tiempo se informó que durante la realización del juicio oral, ambas víctimas dieron su testimonio a los jueces a través de un circuito cerrado de televisión.
Además y considerando los antecedentes del hombre, la pena impuesta en este caso es de cumplimiento efectivo, sin derecho a beneficios.
Asimismo, el fallo condena al acusado a las penas de interdicción del derecho de ejercer la guarda y ser oído como pariente en los casos que la ley designa, y de sujeción a la vigilancia de la autoridad durante los diez años siguientes al cumplimiento de la pena principal.
Por lo anterior, el ahora declarado culpable, deberá informar cada tres meses su domicilio a Carabineros cuando ya esté en libertad.