El ministro Carroza lidera la diligencia.
Aton Chile
SANTIAGO.- Una jornada de careos se lleva a cabo este martes en el despacho del ministro Mario Carroza, en el marco de la reapertura del caso Quemados.
A esta hora, los últimos cinco militares detenidos son enfrentados con con el ex conscripto Fernando Guzmán, cuyo testimonio reabrió la investigación al revelar el pacto de silencio que existió entre los uniformados que participaron del hecho ocurrido el 2 de julio de 1986, donde el fotógrafo Rodrigo Rojas murió y Carmen Gloria Quintana resultó con lesiones graves, tras ser quemados luego se una protesta.
Se trata del capitán (r) del Ejército Pedro Fernández Dittus -quien estuvo a cargo de una patrulla- y los ex conscriptos Leonardo Riquelme, Juan González y Walter Lara, quienes iban con él en el vehículo.
También participan Pedro Franco Rivas, quien también era parte del grupo dirigido por Fernández Dittus, y fue quien confesó, junto a Guzmán, que hubo un pacto de silencio.
Así lo detalló el abogado querellante que representa al Programa de Derechos Humanos del Ministerio del Interior, Rodrigo Lledó, enfatizando que espera que este último pueda optar a beneficios debido a la colaboración sustancial que ha prestado.
También agregó que no descarta solicitar la citación del ex vicecomandante en jefe del Ejercito, Santiago Sinclair, una vez que hayan declarado todos los conscriptos involucrados.