El presidente de los trabajadores del Cobre aseguró que no aceptarán más agresiones a sus asociados.
El Mercurio (archivo)
SANTIAGO.- Preocupada por las condiciones de seguridad que enfrentan los trabajadores de las distintas divisiones de Codelco y la agresión que sufrió uno de sus asociados que se mantiene operativo en la refinería de Chuquicamata, se mostró la Federación de Trabajadores del Cobre.
Lo anterior lo dieron a conocer en una reunión que sostuvieron los dirigentes con el ministro del Interior, Jorge Burgos y el subsecretario de la cartera, Mahmud Aleuy en La Moneda.
En la cita aseguraron repudiar la violencia que se vive en las divisiones luego de nueve días de movilización de los contratistas de la cuprífera y que incluso terminó con uno de ellos fallecidos en un confuso incidente con Carabineros el jueves pasado.
"Queremos dejar absolutamente claro, como trabajadores del cobre, que la responsabilidad de los trabajadores y, particularmente los dirigentes sindicales, es para defender a los trabajadores respecto de sus beneficios, pero también para defender la empresa, porque esta es una empresa del Estado y no vamos a seguir aceptando este tipo de agresiones, entre trabajadores, no lo vamos a permitir", enfatizó el presidente del gremio, Raimundo Espinoza.
"Estos son balines de acero, no vamos a permitir la violencia entre los trabajadores", sostuvo mostrando a las autoridades un proyectil que habría sido lanzado contra los trabajadores de Codelco.
Respecto de la situación existente en El Salvador -división que mantiene sus faenas paralizadas- el dirigente indicó que solicitaron al Gobierno que sea declarado comuna, separada de Diego de Almagro y rechazó las condiciones en que hoy se encuentra producto de las manifestaciones en las vías de acceso a las faenas mineras.
"Hemos estado 9 días sitiados en El Salvador, en la División que nos ha costado sacarla (adelante) después del aluvión. Estuvimos 34 días parados por el aluvión y hoy la tenemos prácticamente sitiada", recordó.
En esa línea insistió que "eso tampoco lo vamos a aceptar, porque el país no puede soportar que la empresa más importante de Chile no le esté entregando los recursos, porque cuando agreden las instalaciones, no están destruyendo solamente la pala o la mina, están destruyendo los hospitales, las jubilaciones para los trabajadores, carreteras, salud. Eso es lo que se está haciendo".
En tanto el ministro Burgos coincidió con la postura de la Federación y señaló que "no hay ninguna justificación (para) que personas que puedan tener reivindicaciones fundadas respecto de situaciones laborales, tomen por sus manos la decisión de arrogar derechos de otras personas y subvertir el orden público".
De esta manera, repudió los incidentes ocurridos esta madrugada donde un grupo de
trabajadores contratistas de la División de El Teniente quemaron un bus y encendieron barricadas en la Ruta 5 Sur.