Carmen Gloria Quintana fue quemada viva en julio de 1986.
El Mercurio
SANTIAGO.- "La muerte de Manuel Contreras significa sólo la muerte de una de las cabezas visibles de una política sistemática de violaciones a los derechos humanos y represión de la dictadura cívico militar que gobernó durante 17 años nuestro país".
Así se refirió este lunes Carmen Gloria Quintana al fallecimiento del ex jefe de la DINA, ocurrido el viernes en el Hospital Militar.
La única sobreviviente del caso Quemados -quien fue rociada con bencina por una patrulla de militares para posteriormente prenderle fuego- agregó en una declaración pública que murió "un hombre que encarnó la maldad y la crueldad como pocos seres humanos en la historia de la humanidad".
"Manuel Contreras se hizo cargo, diseñó y ejecutó la política de exterminio de quienes se opusieron a Pinochet y a su dictadura, cumpliendo con ello el cometido que el mismo dictador le encomendó", continuó, afirmando que ambos generales "utilizaron a las Fuerzas Armadas y a Carabineros para satisfacer la ambición de Pinochet de perpetuarse en el poder, y erradicar toda resistencia al modelo de sociedad que la Junta Militar y la derecha económica compartieron".
En la misiva, la mujer también hizo un llamado a las Fuerzas Armadas para terminar con cualquier tipo de pacto destinado a encubrir violaciones a los derechos humanos, que tal como ha denunciado, existen hasta hoy.
"Llamo a los cobardes que siguen en sus filas a marcharse y asumir su reponsabilidad y dejar sus cargos a soldados valientes y honorables que deben haber en sus filas, para volver a creer y respetar al Ejército de O'Higgins y Carrera", recalcó categórica.
Contreras falleció la noche del viernes producto de las enfermedades que sufría desde hace un tiempo.
El general (r) estaba recluido en Punta Peuco, donde debía cumplir una condena de 526 años de cárcel por delitos de lesa humanidad.