Lorena Pizarro dice que no descarta que militares en rebeldía cuenten con una red de apoyo ejercida por miembros del Ejército.
SANTIAGO.- La presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, Lorena Pizarro, se refirió este sábado a la decisión de uno de los catorce condenados por el secuestro y homicidio del ex químico de la Dirección Nacional de Inteligencia (DINA) Eugenio Berríos -ocurrido en 1991-, quien decidió vivir en la clandestinidad y no entregarse para cumplir su pena.
En entrevista con Biobío, Pizarro afirmó que no le extrañaría que el ex capitán del Ejército Arturo Silva -condenado a 15 años y un día como autor de secuestro con homicidio y cinco años y un día por asociación ilícita- cuente con una red de apoyo que le permita evadir a la justicia.
Ello, porque según trascendió, el ex uniformado tras conocer el fallo de la Corte Suprema que confirmó la sentencia dictada en su contra por el juez Alejandro Madrid, comunicó a su familia su decisión de declararse en rebeldía argumentando que no irá a la cárcel.
"Él ha tenido un rol activo en las Fuerzas Armadas en relación a amparar el genocidio y a generar condiciones para que la impunidad sea ejercida" agregó al respecto la dirigenta, reafirmando que este apoyo sería ejercido por miembros de la institución castrense.
Silva es uno de los dos condenados que aún no se han puesto a disposición de Gendarmería para ingresar al penal Punta Peuco, en Tiltil, donde cumplirá su condena.
El otro militar es Jaime Torres Gacitúa, quien recibió una pena de 10 años y un día por secuestro y cinco años y un día por asociación ilícita.
Los otros 11 sentenciados ya se encuentra en el recinto carcelario donde comparten con otros condenados por violaciones a los derechos humanos.