SANTIAGO.- Este año, la Carretera Austral suma 24 kilómetros de pavimento en distintos sectores de las regiones de Los Lagos y de Aysén, pero los alcaldes de la zona siguen mostrando su preocupación, ya que la mayor parte de la vía (más del 60%) sigue siendo de ripio.
Pese a que el pavimento de la vía es una antigua demanda para unos 120 mil aiseninos, apenas el 36,9% de los 1.255 km. de la Ruta 7, el nombre oficial del camino que parte en Puerto Montt y termina en Punta Pisagua, en Aysén, tiene ese estándar, según informa "
El Mercurio".
Otro 63,1% de la emblemática vía sigue siendo una senda de ripio en algunos casos apenas de 7 metros de ancho. Y aunque se están haciendo obras básicas, como instalación de alcantarillas, ensanches de caminos, despejes, como al sur de Caleta Gonzalo, o al sur de Cerro Castillo, por ejemplo, siguen siendo vías con bajo estándar.
Así lo expresa el alcalde de Cochrane, Patricio Ulloa: "No hay que ser ciegos y no valorar los recursos comprometidos para avanzar en la Carretera Austral, pero al ritmo de hoy vamos a llegar con pavimento a Cochrane en unos 50 años más".
Para el jefe edilicio "un camino pavimentado bajará costos (...) y apuntará al desarrollo. Empresas e industrias podrán instalarse en la región", dice Ulloa.
Un retraso que ahonda el aislamiento. Cochrane está a solo 330 km de la capital regional, Coyhaique, y el viaje en bus toma 8 ó 9 horas, con suerte. Más del doble que para una distancia similar, como Santiago-Linares.
Los chaiteninos, a menos de 300 km de Puerto Montt, emplean un día entero para llegar a hacer cualquier trámite o ir a una consulta médica.
Y los residentes de Villa O'Higgins, la puerta de entrada al Campo de Hielo Sur, pueden tardar hasta tres días a Coyhaique "si las condiciones están malas en el fiordo, por ejemplo", dice el alcalde, Roberto Recabal. Eso, para una distancia similar a Santiago-Los Ángeles, que se une en 5 ó 6 horas.
Con nieve, escarcha o lluvia, los tiempos de traslado pueden triplicarse, lo que impacta dramáticamente en costos de transporte e incrementa hasta en un 150% el precio de la canasta básica, según la Cámara de Comercio y Turismo de Villa O'Higgins.
"La pavimentación de nuevos tramos es muy necesaria", dice el transportista Marcial Moya, "no solo por acortar tiempos de viaje, también para evitar el daño a los vehículos", "y para que los turistas que nos visitan vuelvan", enfatiza.
Pese a los inmensos atractivos turísticos, la llegada de visitantes a la región "es bajísima", dice el alcalde de Cochrane.
Solo unas 130 mil personas en temporada alta, según el Observatorio Turístico de Aysén.
Los aiseninos valoran las iniciativas, como los $40 mil millones asignados por el MOP en el primer semestre de 2015 para diseños, obras e inspección.
"Se ve avance", dice el alcalde de Tortel, Bernardo López, respecto de obras básicas al sur de Cerro Castillo.
Pero quieren "más velocidad y una estrategia distinta", dice Recabal, "como lo hizo el CMT, que avanzaba al mismo tiempo desde el norte y el sur hasta juntar las puntas. Avanzaba con más dinamismo, aportando a la economía local, beneficiando a poblados vecinos, generaba empleo".
"No podemos esperar décadas a que el asfalto llegue de Coyhaique a O'Higgins", dice Recabal.
Más optimista, Lindor González, colono de Cerro Castillo, dice que se ha modernizado rápido el sector, "hace pocos años andábamos con puros 'pilcheros' de carga, y ahora tenemos carretera y caminos pavimentados".
Pero son características propias de la vía, construida para garantizar la conectividad austral, las que imponen altos obstáculos a la pavimentación.
Duras condiciones geográficas y ambientales, "condiciones de suelo, zonas de montaña o derrumbes retrasan los proyectos", afirma el seremi del MOP en Aysén, Cristián Manríquez.
Recabal lo reconoce: "Por eso tienen que iniciar estudios de ingeniería. No es llegar y asfaltar. En muchos lugares tienen que mejorar diseños, trazados. Pero tienen que partir", enfatiza.