SANTIAGO.- Los 73 mineros de Curanilahue, que hace 13 días protestan bajo tierra por el no pago de sueldos e irregularidades con sus imposiciones, decidieron aumentar la medida de presión, cerrando todos los accesos a la mina, no aceptando comida ni agua.
La determinación llegó justo el día cuando la Intendencia del Biobío y la Seremi de Minería interpusieron un recurso de protección en favor de los trabajadores, según señala "Soychile.cl".
Los trabajadores se encuentran a 450 metros de profundidad en la Mina Santa Ana. Uno de los 73 que iniciarion la protesta, abandonó la mina ya que se descompensó durante la mañana teniendo que ser trasladado hasta el Hospital.
La medida de los trabajadores fue adoptada luego de que Rodrigo Danús, sindicado por los trabajadores como el principal propietario, afirmó que vendió sus acciones de Santa Ana hace ocho meses a Miguel Hernández, quien figura como representante legal, pero este dijo no ser el dueño.