SANTIAGO.- Desde las 6:00 de esta mañana, personal de Carabineros y de la Municipalidad de Santiago comenzó a desalojar a decenas de familias de inmigrantes que habitaban dos edificios ubicados en el sector de calle General Mackenna, en el centro de la capital.
La disposición fue ordenada por la alcaldesa, Carolina Tohá, luego de informes de la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) que constatan riesgos relacionados al deficiente estado del sistema eléctrico en los inmuebles.
Durante el procedimiento fueron desalojadas al menos 30 familias, entre 180 y 200 personas. Los afectados denunciaron que habían sido puestos en la calle sin tener posibilidades concretas de obtener nuevos alojamientos.
"Nos tratan como cualquier basura. Presidenta (Bachelet), necesitamos dónde vivir, tenemos hijos", exclamó una de las afectadas mientras se desarrollaba el desalojo.
"¿De dónde va a sacar dinero la gente para encontrar otro lugar?", se preguntó otra migrante.
Dirigentes de organizaciones de migrantes denunciaron que el desalojo de los edificios no se aplicó a los locales comerciales ubicados en el primer piso.
Delia Torres Pérez, dirigenta de los habitantes de los inmuebles, afirmó que contaban con contratos y pagaban arriendo. "Podemos mostrar nuestros recibos. Es completamente falso que no tengamos contratos", sostuvo.
"La alcaldesa se comprometió a ofrecernos alguna alternativa, pero ahora nos están lanzando a la calle simplemente, con nuestros niños y nuestras cosas. Nosotros no pedimos gratuidad, no pedimos que nos regalen nada, nosotros podemos pagar, pero ahora no tenemos dónde ir", añadió.
Un recurso judicial presentado por los vecinos ante la Corte de Apelaciones fue rechazado por el tribunal, argumentando inexistencia de contratos de arriendo. La comunidad apeló, y el caso se tramita en la Tercera Sala Constitucional de la Corte Suprema.
