SANTIAGO.- La ministra de Salud Carmen Castillo desestimó esta mañana los reparos hechos por cuatro magistrados de la Corte Suprema por el proyecto que despenaliza la interrupción del embarazo en tres causales, especialmente en el caso de "violación".
La secretaria de Estado descartó reemplazar dicho término por "agresión sexual" ya que éste "es muy amplio. Nos vamos a quedar con violación", apuntó en entrevista con Tele13 Radio.
Lo anterior porque el máximo tribunal sostuvo en un informe que "la utilización del término técnico jurídico 'violación' respecto a una valoración que debe realizar un equipo médico, podría causar importantes problemas prácticos que aconsejan revisar la redacción de la causal".
Esto porque según indican "existen violaciones en las que no pueden identificarse rastros físicos en la víctima. Ello es especialmente posible en casos de violaciones realizadas mediante intimidación, o con empleo de sustancias ilícitas, o respecto de menores de edad que han consentido en el acto".
Y así cuestionan que "ante la ausencia de rastros forenses cabría preguntarse ¿cuál será el deber del médico tratante?, ¿priorizará la mera declaración de la víctima o revaluará su situación mediante un equipo multidisciplinario?, ¿el médico tratante deberá autorizar todas las interrupciones de embarazo respecto de menores de 14 años?".
Al respecto Castillo desestimó lo anterior argumentando que "ninguna mujer va a mentir porque fue violada por lograr una interrupción de embarazo".
Al mismo tiempo señaló que "se van a capacitar a los equipos de Salud para detectar y tener esta empatía más rápido".
