Para muchos en el oficialismo, la designación de Abbott significa la continuidad de la gestión de Sabas Chahuán al mando del Ministerio Público.
Aton Chile
SAANTIAGO.- "El Gobierno estará dos años más, el fiscal ocho". La frase la han pronunciado varios dirigentes oficialistas que se han declarado sorprendidos por la decisión de la Presidenta Michelle Bachelet de proponer a Jorge Abbot para asumir la Fiscalía Nacional.
Por ello, algunos han decidido plantear el tema en el comité político que hoy a las diez de la mañana sostendrán los presidentes de partido con los ministros políticos de La Moneda, según informó "El Mercurio".
"El fiscal no será solamente de este gobierno, sino que de tres más, por lo tanto es un cargo de Estado; y más que una persona, definamos un criterio que le dé credibilidad, independencia y se haga cargo de las verdaderas tareas que el fiscal debe asumir. Quiero que el Gobierno explique por qué Abbott, más que un nombre, encarna la capacidad de hacerse cargo de enfrentar el delito, por ejemplo, que es lo que más importa a los chilenos", dijo el vocero de la Nueva Mayoría y presidente del PR, Ernesto Velasco.
Y es que para muchos en el oficialismo el nombre de Abbott significa una continuidad de la actual Fiscalía Nacional, la cual, más allá de la investigación de los casos Penta, SQM y Caval, ha tenido insuficiencias en su gestión, principalmente en lo que respecta a los delitos de propiedad.
"En el comité político le pediré al ministro del Interior que me aclare por qué se designó a Abbott y si tiene o no los votos para que sea ratificado en el Senado. No estamos para una segunda derrota", dijo el presidente del MAS, Alejandro Navarro.
Velasco, en este sentido, insistió en que "no puede pasar lo mismo que con el Contralor, y tiene que promover un diálogo con los partidos, con los parlamentarios, construir una política que permita darle autonomía, credibilidad a instituciones que son del Estado y no de un gobierno de turno".
De todas maneras, desde la DC, el presidente del partido, Jorge Pizarro, se distanció de sus pares y afirmó que "no corresponde tratar este tema en el comité político, porque la Presidenta dentro de sus atribuciones tiene la posibilidad de proponer un nombre de la quina que presenta la Corte, y el Senado de manera autónoma resuelve si aprueba, rechaza o se abstiene".
Si bien en el Gobierno en un comienzo comentaban que podrían contar con los votos de RN, desde ese partido han dicho que la ratificación de Abbott genera dudas, lo mismo que ocurre en la UDI. Ambas colectividades definirán este tema mañana en la reunión de sus respectivos comités de senadores.