SANTIAGO.- Un total de 168 inmuebles deberán ser devueltos a sus dueños por parte de los hermanos Marcos y Pedro Elgueta Cárcamo, los mismos empresarios que fueron condenados por el bullado caso de la financiera "Eurolatina".
Lo anterior a raíz de una nueva investigación por estafa y usura en su contra realizada por la fiscalía metropolitana Centro-Norte en contras de las financieras Los Queñes-Hippocapital, de las cuales ellos son dueños.
Los sujetos deberán hacer devolución de los inmuebles luego de llegar a un acuerdo con la fiscal de la unidad de Alta Complejidad, Tania Sironvalle, quien los llevó a un juicio abreviado.
En él se condenó a tres años de presidio a los hermanos Elgueta, pero se alcanzó una suspensión condicional con las cónyuges de éstos.
El acuerdo, que fue respaldado por las víctimas de la financiera implica el alzamiento de las 168 hipotecas, el alzamiento de las prohibiciones que tenían para celebrar contratos con estos inmuebles y la renuncia a realizar acciones civiles en contra de los deudores.
Además de recuperar sus propiedades, las víctimas no tendrán que cancelar los montos de dinero que adeuden a Los Queñes-Hippocapital.
Durante la audiencia, los hermanos Pedro y Marcos Elgueta pidieron perdón a las víctimas por el daño que les ocasionaron. Ambos se encuentran privados de libertad cumpliendo condena por los delitos cometidos en el marco de Eurolatina I.
Acuerdo inédito
El acuerdo alcanzado por la Fiscalía Centro Norte es inédito. Según explicó la fiscal Tania Sironvalle, con "este acuerdo asegura la condena de los principales responsables de las estafas y usuras asociadas a Hippocapital Los Queñes, que son Marcos y Pedro Elgueta y por otro lado permite obtener de manera inmediata la recuperación de los inmuebles de 168 víctimas de esta financiera".
A diferencia de lo ocurrido en la investigación de la Fiscalía Centro Norte, los deudores del antiguo sistema aún no logran la recuperación de sus viviendas.
Según explicó la fiscalía, en este caso se optó por alcanzar el mayor beneficio para las víctimas, que son personas de escasos recursos y con importantes necesidades económicas y sociales.