Se trata de una toma realizada el pasado 4 de noviembre en la zona y que muestra más de 10 uniformados, los que estaban provistos de armas largas y estaban acompañados por sujeto vestido de civil.
En una diplomática emanada desde la Cancillería peruana a Chile y que fue publicada por el diario "El Comercio" se destaca "la importancia de las Normas de Comportamiento para los Puestos de Vigilancia y Patrulla de Control Fronterizo Perú-Chile, marco vigente en la materia desde 1994, cuyos procedimientos han de ser observados y cumplidos estrictamente".
En el texto, Lima destaca "la utilidad de los mecanismos de confianza mutua entre los miembros de las Fuerzas Armadas del Perú y de Chile", asegurando que son "los canales idóneos que contribuyen en el fortalecimiento de la relación entre dos países vecinos".
En sentido, Muñoz llamó al Gobierno de Ollanta Humala a "evitar actos imprudentes e incidentes innecesarios en la zona fronteriza".
También les pidió a "cumplir con los acuerdos de medidas de confianza mutua. En este caso no se cumplió con el debido aviso previo a la presencia del personal uniformado en el sector del Hito 1".
"Respeto mutuo"
En tanto, luego de la aparición de las imágenes, es el Gobierno se envió un comunicado en el que se precisa que el grupo de militares que se aproximó al Hito 1 estaba conformado por 18 personas, cuatro de las cuales estaban con armas largas.
"Conforme a la normativa vigente, los desplazamientos de uniformados a una distancia menor a 100 metros del límite político internacional deben ser comunicados con la debida anticipación a la contraparte", reiteró el Ejecutivo.
El texto del comunicado añade que "el Gobierno de Chile coincide con el del Perú en que es indispensable que nuestras instituciones armadas respeten rigurosamente los acuerdos bilaterales para evitar incidentes fronterizos innecesarios. Chile reitera su voluntad de avanzar con el Perú en una senda de cooperación e integración, en una perspectiva de futuro y respeto mutuo".