El ministro de Relaciones Exteriores Heraldo Muñoz.
El Mercurio (Archivo)
SANTIAGO.- El hecho de que Bolivia haya aprovechado un encuentro de ministros de Energía la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) para entregar un documento alusivo a su demanda marítima en contra de Chile, molestó en Cancillería.
Lo anterior, según informa hoy
"El Mercurio", llevó al ministro Heraldo Muñoz a ordenar el envío de una nota diplomática al organismo, cuya presidencia pro tempore está en este momento en manos de Ecuador.
En la nota de reclamo, Chile manifestó su molestia por la entrega del material y aclaró a Celac que este tipo de encuentros se trata de instancias multilaterales, por lo que no corresponde que se haga entrega de publicaciones que dan cuenta de temas que son netamente bilaterales.
En ese contexto, el canciller Heraldo Muñoz hizo ayer referencia, en un seminario sobre relaciones internacionales, a eventuales divisiones entre los países, que ha producido, a su juicio, el recurso boliviano.
"La demanda por parte de Bolivia se ha constituido en un error histórico que ha separado aún más a nuestros pueblos. Chile estaba disponible para abordar la agenda de 13 puntos sin exclusiones, y hoy día vemos que hay una distancia mucho mayor que antes, y eso no le hace bien a nadie", fue el diagnóstico del ministro, quien realizó un llamado a "perseverar en la búsqueda de los vínculos de integración y diálogo, salvaguardando por cierto la soberanía territorial del país".
En tanto desde Roma, el presidente de Bolivia, Evo Morales, afirmó que se trata de "países vecinos que no pueden hacer un conflicto porque, esa invasión de 1879, viene por razones económicas pero de oligarquías chilenas (...) Estamos en tiempos de paz, de interacción para la liberación de nuestros pueblos".
Mientras que el vocero de la demanda Carlos Mesa, acusó a Chile de poner en riesgo la seguridad de la región, a raíz de la realización del ejercicio militar "Huracán", durante la próxima semana, y que contará con la presencia de la Presidenta Bachelet. El Gobierno chileno ha señalado que se trata de un ejercicio "habitual".