SANTIAGO.- La última información entregada por el Ministerio de Salud sobre el endeudamiento de sus hospitales cifró en $246 mil millones (cerca de US$ 350 millones) el monto de compromisos pendientes a agosto de este año. Se trata del más alto nivel de deuda que ha tenido el sistema y que, por lo mismo, ha sido motivo de críticas estas semanas durante la discusión del presupuesto del sector para 2016.
Para paliar la situación de endeudamiento, el ministerio de Hacienda ha hecho y comprometido aportes adicionales que, en total, este año sumarán $211 mil millones (casi US$ 300 millones). Dado que cuenta con esas remesas, la ministra de Salud, Carmen Castillo, ha dicho que esperan terminar el año con pasivos cercanos a los $150 mil millones (US$ 212 millones) y alrededor de esa cifra el endeudamiento de los hospitales.
De hecho, en el proyecto de presupuesto 2016 para el sector ya se consideran otros $50 mil millones (US$ 71 millones) para el servicio de la deuda.
Con estos datos a la vista, la consultora Altura Management analizó el comportamiento de las finanzas de los servicios de salud y concluyó que los cuantiosos aportes de Hacienda no generan ningún impacto, "porque solo se está cubriendo la deuda generada durante 2015", sostiene el gerente de estudios de la firma, Bernardo Luque.
A su juicio según informa hoy
"El Mercurio", "el problema es mayor, porque si uno mira el proyecto de presupuesto para el próximo año, no hay un aporte contundente ni que vaya a la raíz del problema, que es que a los hospitales se les paga menos de lo que cuesta cada actividad que realizan. Por ejemplo, se espera incrementar en 5,3%, es decir, $67 mil millones (US$ 97 millones), los recursos para insumos, materias primas y todo lo que se compra a terceros, pero nosotros estimamos que los costos de estas crecieron 9% el último año".
Considerando todos estos factores, la consultora proyecta que el endeudamiento seguirá escalando y a fines de 2016 llegaría a un valor cercano a los $325 mil millones (US$ 460 millones).
La solución, plantea Luque, "no es inyectar e inyectar más recursos, sino hacer gestión, reducir las ineficiencias que pueda tener el sistema, porque la producción entre un año y otro no ha variado tanto, como sí lo ha hecho la deuda".
Nivel "razonable"
En el Ministerio de Salud están conscientes del problema. La propia ministra Carmen Castillo reconoce que, por ejemplo, las atenciones que están consideradas en el plan AUGE "es obligación resolverlas, y ese es un componente que hemos transparentado que es parte de la deuda".
Y en un oficio entregado por su cartera a la Cámara de Diputados, se expresa que "se trata de un problema de Estado que no se ha resuelto", aunque de todas maneras señalan que se está trabajando con Hacienda para analizar los factores estructurales que llevan a esta situación.
"Con todo lo anterior -dice el oficio- proyectamos que esta administración tendrá una deuda que se enmarca dentro de un porcentaje razonable en relación con el presupuesto del sector, esto es, entre 2% y 5%".
Si se considera que el proyecto de presupuesto de Salud para el próximo año es de un total de $6,6 billones (cerca de US$ 9 mil millones), entonces, lo considerado razonable por la administración sería de entre $132 mil millones y $331 mil millones (o sea, entre US$ 137 millones y US$ 469 millones).