Christian Zapata, El Mercurio
SANTIAGO.- Con prisión preventiva quedaron los dos jóvenes sospechosos de haber colocado y detonado un artefacto explosivo durante la madrugada del jueves cerca de la Escuela de Suboficiales de Gendarmería, en la comuna de San Bernardo.
K.G., de 18 años, y J.G., de 22 años, también están vinculados a un hecho parecido en las afueras de la comisaría de San Miguel, el pasado 29 de octubre, según se supo tras la audiencia que duró más de seis horas.
El fiscal Claudio Orellana, de la Fiscalía Metropolitana Sur, señaló esta noche de jueves que "la prisión preventiva, cada vez que la solicita el Ministerio Público y es concedida por los tribunales, por cierto que la valoramos grandemente y, la segunda circunstancia, el contar con un plazo de investigación bastante acotado de 150 días".
Orellana dijo que van a tratar en ese plazo, el que consideró "corto", de que la investigación sea lo "suficientemente avanzada" para no tener que pedir un plazo adicional.
Por otro lado, la defensa de ambos jóvenes pidió en la audiencia, que se extendió por cerca de seis horas, que fueran recluidos en la cárcel de alta seguridad.
