Ex ministro de Justicia (2010-2011) y el segundo ministro de Educación (2011) del gobierno de Sebastián Piñera, en 2012 Bulnes fue nombrado embajador en los Estados Unidos y el 6 de mayo de 2013 fue designado como agente frente a la demanda iniciada por Bolivia. En 2014 fue confirmado en el cargo por Bachelet.
Christian Zúñiga, El Mercurio
SANTIAGO.- Felipe Bulnes, abogado, ex ministro de Justicia y de Educación, y militante de RN, se despidió del cargo como agente de Chile ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, insistiendo en la tesis jurídica de que la determinación del tribunal respecto de la demanda marítima boliviana, ha sido favorable para la posición chilena.
Ello no obstante el pesimismo que generó el fallo en la política interna del país -que rechazó la objeción chilena y se declaró competente para revisar la demanda de La Paz-, lo que, a juicio de Bulnes, derivó en una "
falta de cohesión" nacional, siendo determinante en su decisión de renunciar hoy.
Esto, porque según el ex agente, pese a que el fallo de la CIJ no era lo que esperaba la opinión pública, limitó jurídicamente la posición Boliviana, fortaleciendo la chilena al no poner en riesgo la integridad del territorio nacional. Así lo señaló Bulnes en su carta de renuncia a la Presidenta Michelle Bachelet.
"Tal como lo conversamos personalmente, después de conocida la sentencia (de la CIJ), lo resuelto por la corte al rechazar la objeción preliminar, opuesta por Chile, ha significado eliminar temporalmente el riesgo que de este juicio pudiese surgir una resolución final, que afectara nuestra integridad territorial. De hecho, la razón por la cual la corte consideró que la objeción chilena debía ser rechazada es porque determinó que no existía tal riesgo, producto de este juicio", argumentó en la carta que se dio a conocer hoy, a la vez que se conocía que sería reemplazado en el cargo por José Miguel Insulza.
"Así, declaró que ha de entenderse que Bolivia persigue una obligación de negociar una salida soberna al Océano Pacífico pero en caso alguno con un resultado predeterminado, señalando expresamente que la posibilidad de imponer dicho resultado está fuera de su competencia (párrafo 33 de la sentencia del 24 de septiembre). Por lo tanto aquí no estamos hablando de triunfos morales, sino que de una salvaguarda judicial clave para los intereses nacionales", enfatiza Bulnes en el mencionado texto.
Previamente, un mes después de conocido el fallo de la CIJ, el ahora ex agente lamentaba las reacciones registradas en el país.
"Creo que comunicacionalmente algunos, sin darse cuenta, le han hecho
un gran favor a Bolivia al declararnos derrotados, sumándose así a las celebraciones de Bolivia, la que, en la euforia, se está excusando de reconocer lo que pasó", señaló, en una entrevista concedida al diario "El Mercurio".
Así, recalcaba que con su decisión, la Corte "en vez de limitar los fundamentos de Bolivia, lo que hizo fue limitar sus peticiones, reduciendo sustancialmente el alcance y expectativas de su demanda".
En este plano, explicó que el tribunal consideró que dicha demanda no persigue una obligación de negociar con un resultado predeterminado, sino que meramente una obligación de negociar.
"Entendida así la demanda, se comprende que la Corte haya considerado que el reclamo de Bolivia no afecta el tratado de 1904, pues de este juicio no puede salir ningún pronunciamiento que afecte nuestra integridad territorial", insistió.