La ministra de Salud, Carmen Castillo, junto al abogado Javier Couso.
Agencia UNO.
SANTIAGO.- Ante la Sala de la Cámara, la ministra de Salud Carmen Castillo, afirmó que la acusación constitucional presentada en su contra por la oposición "es infundada e improcedente", por lo cual apeló a la llamada "cuestión previa" con el fin de que sea desechado el libelo por no cumplir con los requisitos que establece la Constitución.
En una breve intervención, Castillo indicó que "vivimos tiempos difíciles en salud que algunos llaman crisis con el ánimo de crear una desesperanza crónica y de alimentarla continuamente de malas noticias. Yo me encuentro entre los que vemos en esta situación una gran oportunidad para mejorar y un desafío que la vida buena nos regala para con serenidad y seriedad servir a Chile y a su gente".
Asimismo, la secretaria de Estado aseguró que ha cumplido sus funciones como corresponde, que lo seguirá haciendo y que "ninguna maniobra política" se lo impedirá.
En ese sentido, Castillo precisó que "esta acusación en mi contra ha sido un nuevo desafío, pero estoy tranquila, confío en los sólidos argumentos para rechazarla y en la racionalidad de este procedimiento".
"Tengo la tranquilidad de no haber infringido nunca la Constitución ni las leyes, tampoco he dejado las leyes sin ejecución. Muy por el contrario he dado fiel cumplimiento a todas las obligaciones que como ministra tengo", sentenció.
De esta forma, Castillo recalcó que "esta acusación en mi contra es infundada e improcedente, por lo mismo haré valer la denominada cuestión previa".
Abogado argumenta la "cuestión previa"
Luego fue el turno del abogado defensor de la titular del Minsal, Javier Couso, quien entregó los argumentos para invocar la llamada "cuestión previa" y con la cual buscan lograr que el libelo sea rechazado.
Al respecto, Couso fue tajante al señalar que "una acusación no puede fundarse en un mero desacuerdo con la calidad de la gestión de una autoridad, sino que requiere incumplimientos específicos y probados que configuren una causal taxativamente determinada por la Constitución".
Asimismo, el jurista recalcó que un libelo de este tipo es un mecanismo de "uso excepcional", agregando que "a una ministra de Estado no se le puede juzgar por situaciones sistemáticas".
"No puede transformarse la acusación constitucional en una herramienta de legítimas críticas políticas o de mérito o de gestión. Los diputados cuentan con otras herramientas privilegiadas para hacer legítimas críticas políticas", acotó Couso.
Además, el abogado apuntó a que la acusación redactada por la oposición está "plagada de afirmaciones que constituyen juicios de mérito sobre el desempeño del sistema nacional de salud (...) o incluso a hechos de competencias de otras autoridades o anteriores ministros de Salud", y no sólo a Castillo.
A su juicio, se llevaría "una discusión ideológica política al plano de la acusación constitucional, por lo tanto, no resulta procedente a nuestro juicio".
Por todo esto, Couso puntualizó que al carecer de argumentos, esperan que la acusación se declare "inadmisible" y que los diputados acojan la
"cuestión previa".
La acusación será
sometida a votación por los diputados en las próximas horas, de ser aprobada pasaría luego al Senado.
