SANTIAGO.- El subsecretario de Prevención del Delito, Antonio Frey, se refirió este sábado a la percepción de la ciudadanía respecto a que no cree en que haya una disminución en la delincuencia.
Según dijo en entrevista con El Mercurio, "hay tres grandes fenómenos: primero, una disociación cada vez más marcada entre la inseguridad como percepción de los ciudadanos y la delincuencia. Mientras venimos bajando en las cifras globales, hay un aumento del temor muy importante. Y nuestra pega es tratar de que eso no esté tan disociado".
"Lo segundo, es que a pesar de esa baja, tenemos un aumento de los delitos violentos. Se les llama 'portonazos', pero son robos violentos con intimidación, donde debemos hacer una política pública que nos permita enfrentar de manera más radical ese problema", agregó.
Por ello, recalcó que uno de los desafíos es lograr "una mayor capacidad de procesar estos delitos para que lleguen a buen puerto". "Cuando hay pruebas contundentes, hay buenas noticias. Hay delitos en que les han dado diez años (de cárcel) a estos caballeros (asaltantes) y cinco años a menores de edad", detalló.
En la misma línea, se refirió a la sensación de la ciudadanía de ineficiencia policial, mencionando que por primera vez todas las instituciones -gobierno, fiscalías, Poder Judicial, Parlamento, policías- están teniendo bajas en la percepción de las personas.
"Está repercutiendo en el aparato público completo, y eso es nuevo", continuó, recalcando que "hay un grado de impunidad que alimenta la percepción de inseguridad y que está afectando a la evaluación de las instituciones, lo que debemos resolver".
"Lo más cómodo para mí, como Ejecutivo, sería echarles la culpa a la fiscalía, a las policías, al Poder Judicial. Esa dinámica es mala para obtener buenos resultados. Lo que tenemos que pensar es cómo una cadena de decisiones puede tener una mejor eficacia. Y eso no pasa porque una entidad sea buena, sino porque la buena o mala decisión de una de estas entidades afecta al resto", aseveró.
Y ejemplificó: "Si yo tengo una persona con un proceso de detención mal llevado y que tiene un conjunto de pruebas mal llevadas, afecta la decisión del Ministerio Público y afecta la decisión del juez. El desafío es cómo hacemos para que todas las entidades involucradas en la toma de decisiones, desde las primeras diligencias hasta la condena, tengan una mejor toma de decisiones y más coordinadas".