SANTIAGO.- Un procedimiento de registro y allanamiento simultáneo realizó Gendarmería de Chile en 19 unidades penales de las 15 regiones del país, dejando como resultado la incautación de más de 800 elementos prohibidos como armas corto punzantes, teléfonos celulares, chips y baterías, entre otros.
La operación, efectuada por personal de los grupos especializados de la institución, en conjunto con los funcionarios de cada una de las unidades penales involucradas, tuvo por objetivo intervenir los sectores donde permanecen internos de alto compromiso delictual y minimizar hechos de violencia.
"Esta intervención masiva responde a la necesidad de evitar que las personas bajo nuestra custodia, provoquen actos de violencia y se agredan entre ellos mismos o a nuestros funcionarios", explicó el subdirector Operativo (s) Maurice Grimalt.
Este operativo nacional, de carácter preventivo, es una de las medidas que Gendarmería ejecuta con el objetivo de mantener un eficaz control de la población penal y evitar situaciones de violencia, hechos que suelen aumentar durante la época estival, ya que las visitas a menudo disminuyen, por el hecho de que las familias se alejan en vacaciones de sus lugares de residencia habitual.
Las unidades penales allanadas están ubicadas en Arica, Alto hospicio, Antofagasta, Copiapó, Chañaral, Vallenar, La Serena, Valparaíso, Colina, Santiago, Rancagua, Talca, Osorno, Puerto Montt, Coyhaique y Punta Arenas y afectan a 3.551 internos.