El presidente de la Confenatach, Luis Reyes.
Archivo El Mercurio
SANTIAGO.- La disputa entre Uber y los taxistas continúa en Santiago. Sin embargo, la Confederación Nacional de Taxis de Chile se reunió este miércoles para discutir los aspectos que predominan en el conflicto entre ambos servicios.
Además, hicieron un mea culpa de las actitudes que han empañado la movilización de estos choferes, como los ataques a vehículos particulares y el mal trabajo realizado por algunos transportistas formales.
"Nosotros llamamos a la calma, que no es el camino el hacer justicia con nuestras propias manos. Para eso están los organismos pertinentes. Volvemos a hacer el llamado de que se calmen por ahora. La autoridad ha recibido los planteamientos de las bases de los sindicatos", señaló el presidente de la Confenatach, Luis Reyes.
Además, hicieron un llamado al Ministro de Transportes, y al Gobierno, de que "el asunto no se les vaya de las manos" y a que fiscalicen a las empresas "que hacen un mal uso de estas aplicaciones". "Nosotros somos tolerantes, comprensivos, estamos por el dialogo, pero eso no sé hasta cuando. Nosotros nos declaramos en estado de alerta interno", advirtió el dirigente nacional.
Según Reyes, la Confederación cuenta con el apoyo de los gremios regionales en esta disputa que, por ahora, se desarrolla a nivel local. "Vamos a llegar, ojalá, en un corto plazo, a un final que nos deje un poco tranquilo a todos", sostuvo.
Por otro lado, también hizo hincapié en las denuncias que apuntan a los colegas que no prestan un buen servicio, asegurando que van "a aplicar internamente los estatutos" y que si detectan a algunos de los socios que no hagan bien el trabajo, van a ser desvinculados del gremio.