SANTIAGO.- El presidente la Corte Suprema, Hugo Dolmestch, aceptó este viernes acoger la invitación que por segunda vez le hizo la comisión de Seguridad de la Cámara en el marco de la polémica generada por la liberación de más de 2 mil condenados beneficiados con la libertad condicional.
Por ello es que se presentó este mediodía a la instancia parlamentaria, que durante su intervención se realizó a puertas cerradas tras decretarse la reserva de la misma.
Según detalló el magistrado tras la reunión, en la que previamente intervinieron el director de Gendarmería Tulio Arce y la ministra de Justicia, Javiera Blanco, la cita fue una "discusión jurídica" entre abogados.
Asimismo, reiteró que en su calidad de máxima autoridad y miembro del Poder Judicial, no está facultado para revisar ni dar explicaciones respecto a la decisiones de los jueces de las comisiones que resolvieron aceptar las solicitudes de los presos, enfatizando que las libertades condicionales dejaron de ser un beneficio y se convirtieron en un derecho.
"Esa es la interpretación de los jueces", recalcó, enfatizando que por ello "quedan menos posibilidades para la subjetividad".
"La ley se aplica como está, pero si a alguien no le parece bien, tendría que instar por cambiarla", aseguró.