SANTIAGO.- El ex Presidente Sebastián Piñera profundizó sus críticas al proceso constituyente que inició el Gobierno, el que, a su juicio, adolece de tres "debilidades".
En una columna de opinión que publica hoy
El Mercurio, el ex gobernante sostiene que éste centra su atención en el mecanismo y no en los contenidos, no da garantías de transparencia y crea el mito de que el "modelo neoliberal" es la causa de los problemas.
Si bien critica el proceso, afirma que es "conveniente y necesario" que el país "haga un gran esfuerzo, en forma institucional y con amplia participación ciudadana, incluyendo un plebiscito ratificatorio" para llevar adelante el proceso.
"Todo ello, para lograr un acuerdo constitucional amplio y sólido que permita modernizar y perfeccionar nuestra Constitución, de modo que ella sea un marco de unidad nacional, con plena legitimidad y que dé estabilidad y proyección para enfrentar los desafíos y aprovechar las oportunidades del futuro", afirma.
El ex Presidente no se queda sólo en la crítica, pues propone caminos para llevar adelante este "acuerdo constitucional": que los partidos y la ciudadanía planteen los principios y contenidos fundamentales, que el Gobierno corrija los "sesgos y desprolijidades cometidas hasta ahora en el proceso de participación ciudadana" y la "designación sesgada" de los facilitadores y que elabore un marco jurídico que regule el proceso
"Mientras estas tres situaciones no sean enfrentadas y resueltas satisfactoriamente, seguirá cuestionada la legitimidad y finalidad del proceso de participación ciudadana impulsado por la Nueva Mayoría", advirtió.
Sus propuestas para una nueva Constitución
Piñera expone en su columna de opinión que entre las principales reformas a la Carta Magna deben estar: "Modernizar el actual régimen presidencial para lograr un mejor equilibrio entre las funciones de los distintos poderes del Estado, robusteciendo las atribuciones del rol del Congreso".
"Fortalecer los derechos de las personas, incluyendo la creación de un Defensor de las Personas, que actúe tanto a nivel político como administrativo en su defensa", añade.
A su juicio, también debe "consagrar a nivel constitucional los deberes del Estado con la sociedad y las personas, como velar por el acceso y la calidad de la educación y la salud, la seguridad ciudadana, la protección del medio ambiente, la lucha contra la pobreza y el logro de una efectiva igualdad de oportunidades".
Otra de sus propuestas son "establecer un mejor equilibrio entre el rol subsidiario y el rol solidario del Estado" e "impulsar la descentralización, traspasando funciones, atribuciones, autonomía y recursos a los gobiernos regionales y comunales, y mejorando sus mecanismos de participación, transparencia y fiscalización".
El ex Presidente destaca que asimismo se debe dar autonomía a la Fiscalía Nacional Económica, el Servicio de Impuestos Internos, el Instituto Nacional de Estadísticas, las superintendencias; junto con modernizar la Contraloría, asegurar la autonomía del Banco Central y modernizar y agilizar el funcionamiento del Congreso y el Poder Judicial.