La alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá.
El Mercurio / Archivo
SANTIAGO.- "Nosotros intentamos bajar las tomas con diálogo (...) pero nos fuimos dando cuenta de que no había interlocutor". Con esas palabras la alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá, explicó este martes el cambio que ha tenido en su postura frente a las movilizaciones en los establecimientos en Santiago.
Este cambio ha sido criticado por autoridades y han señalado que se trata de una "voltereta".
Quienes cuestionan a la autoridad recuerdan las críticas que ella realizaba en contra del ex edil de la comuna, Pablo Zalaquett, cuando éste aplicaba desalojos en los colegios durante los meses de la campaña municipal del 2012.
Así, en agosto de ese año, Tohá aseguró en entrevista con La Tercera que "lo que hace el alcalde Zalaquett con las medidas que toma es garantizar que la crisis va a continuar y la profundiza y la radicaliza (…). El diálogo y la preocupación por la educación no puede comenzar el día de la toma. Los desalojos son la última medida, yo no habría actuado así en este caso, son muy riesgosos".
Pero la postura de la edil fue variando durante su gestión al mando de la Municipalidad de Santiago y ante algunos hechos ocurridos en establecimientos comenzó a manifestar reparos, tal como señaló en esa época a través de su cuenta de Twitter.
Ese mismo día de mayo del 2014, la alcaldesa reconocía por la misma red social que las tomas se deslegitimaron al derivar en vandalismo.
Hoy, en tanto, Tohá fue mucho más tajante en su posición ante las tomas, asegurando a Tele13 Radio, que "hoy tengo claridad de que no hay ninguna forma de bajar una toma que no sea por el desalojo inmediato. No hay otra manera".
La explicación de la edil
Consciente de su cambio de mirada, Tohá explicó que esto se debe a que aunque "se va a decir muchas veces que cambiamos de posición. Yo estoy tranquila de haber sentado todos los caminos al diálogo, de haber abierto todas las puertas y de haber demostrado que por esa vía no había fórmula de solución".
En esa línea, la jefa comunal relacionó esto con los graves destrozos que se producen en los liceos, agregando que "hay un clima de temor entre las comunidades escolares. La gente no se atreve a disentir de los grupos más radicalizados". Postura que advirtió ayer también a través de su Twitter.
En tanto, hoy recordó que "este movimiento fue un gran movimiento en un momento determinado, que logró generar la adhesión del país entero (...) pero ha pasado el tiempo y hoy ya estamos en otra situación (...) el movimiento estudiantil ha ido perdiendo su foco y también ha sido tomado por grupos que ya no son representativos de la comunidad".