Los comerciantes critican que las elecciones coincidan con el Día del Papá.
El Mercurio (archivo)
SANTIAGO.- Este domingo se realizarán las primeras elecciones primarias municipales de alcaldes en 93 comunas del país. Como es tradicional en este tipo de acto cívico, hay variadas obligaciones y también restricciones, las que afectan directamente al comercio.
La Ley Orgánica Constitucional sobre Votaciones populares y escrutinios
prohíbe la venta de alcohol para consumo en el local o fuera de él- excepto en los hoteles para pasajeros que pernocten en ellos- en las comunas donde se realicen los comicios a partir de las 5:00 horas y hasta dos horas después cerrada la votación.
El problema, para algunos, es que este domingo se celebra también el Día del Padre, y uno de los actos más comunes es festejar con él, almorzando en restaurantes o por ejemplo con un asado y un buen vino.
Los más afectados, dicen, son los dueños de restaurantes y botillerías, especialmente porque no en todas las comunas se realizarán las primarias.
"Sin duda alguna en un domingo tradicional, común y corriente, no nos afectaría mayormente porque entendemos que hay una situación social y política de por medio. Ahora con las primarias, no habiendo en todas las comunas, nos sentimos un poco perjudicados porque si no hay en La Reina, por ejemplo, la gente se va a ir almorzar allá", explica Hugo Córdova, vocero del Centro Gastronómico Plaza Ñuñoa.
Hugo Cordova:
"Sin duda alguna en un domingo tradicional, común y corriente, no nos afectaría mayormente porque entendemos que hay una situación social y política de por medio. Ahora con las primarias, no habiendo en todas las comunas, nos sentimos un poco perjudicados porque si no hay en La Reina, por ejemplo, la gente se va a ir almorzar allá"
El dirigente aclara que igualmente abrirán sus puertas, pero sin vender alcohol. "No queremos deprimirnos y lo asumimos como un costo cívico, pero queremos que nuestras autoridades entiendan que también estamos haciendo un sacrificio laboral", recalcó.
Más tajante es el presidente de la Asociación Chilena de Gastronomía (Achiga), Fernando de la Fuente, quien cataloga la norma como "tercermundista" y asegura que "lo más desagradable es que la gente va a cruzar la calle y estás en otra comuna donde si pueden tener los restaurantes abiertos".
"Encuentro que es tercermundista que tengamos que convivir con una ley seca en un país donde concurrir a las urnas no es un acto obligatorio. Tener una ley así y perjudicar a los operadores de restaurantes, me parece que es una tomadura de pelo porque no se prevén que estas cosas van a pasar", enfatizó.
De la Fuente, explica que los domingos las ventas aumentan en un 70% respecto a un día normal, donde en un local para 100 personas la venta es cercana a los $3 millones (el domingo) disparándose esa cifra en fechas como el Día del Padre.
Botillerías
La "ley seca" es más estricta con las botillerías, ya que éstas no pueden abrir en el mencionado horario.
"Esto perjudica notablemente a los que trabajan los días domingos. Afecta sobre todo en los sectores que son más 'dormitorio' porque la gente como está en la casa, tranquilo, se lleva algo para tomar en su casa", manifestó Jorge Eguiguren, dueño de botillería en Ñuñoa y presidente de la Cámara de Comercio y Turismo de la misma comuna.
En esa línea el comerciante recalcó que la medida, como va a ser aplicada, genera incluso un riesgo para la población.
"La venta se va a hacer igual y además es más riesgoso porque promueve el desplazamiento entre comunas. Porque la gente, que quiere tomar, va a partir a 'chuchunco (sic) a comprar y a lo mejor va a ir medio 'puesto' y eso es peligroso", añadió.