SANTIAGO.- Tráfico de inmigrantes y asociación ilícita son los dos ilícitos por los que un grupo delictual fue condenado en las últimas horas en la región de Arica y Parinacota.
Se trata de cuatro colombianos y un chileno, quienes cobraban dinero para hacer ingresar al país de manera ilegal a ciudadanos dominicanos, a través de campos minados desde Perú.
Los sujetos fueron detenidos en septiembre del año pasado al internar a nueve ciudadanos dominicanos a nuestro país por una zona de campos minados.
Durante la investigación del fiscal Daniel Valenzuela, se estableció que los sujetos tenían diversos roles, desde el ingreso ilegal a Arica, la mantención en esa ciudad y posterior traslado a la capital.
"Los extranjeros fueron captados en la ciudad de Tacna y debieron pagar, cada uno, la suma de 150 dólares para ser ingresados clandestinamente a Chile y ser trasladados hasta Santiago. Esta organización tenía sus roles bien definidos e ingresaron a estas víctimas exponiéndolas claramente al peligro, ya que los hacían caminar por zonas de campos minados", expresó el persecutor.
Las condenas se dieron en el marco de una audiencia de juicio abreviado en el juzgado de Garantía, tras el término de la investigación del fiscal Valenzuela, quien trabajó junto a funcionarios de Carabineros y en la que los acusados reconocieron los hechos de la acusación y su participación.
Los colombianos fueron identificados como Sandra López González, Denny Cossio Balarezo, Boby Bairon Orobio Murillo y Eliecer Rentería Otero, mientras que el chileno es Gino Marchese Miño.
Ellos fueron condenados a penas remitidas de entre 541 días y 300 días por el delito de tráfico de migrantes poniendo en riesgo la vida de las víctimas, así como a otras penas de 61 y 41 días por asociación ilícita para el tráfico de migrantes.
Un quinto acusado colombiano, Marvin Grueso Alegría, enfrentará en los próximos días la misma audiencia de juicio abreviado por los mismos delitos.
Los extranjeros deberán cumplir sus condenas en el país y posteriormente serán expulsados, debido a que están de manera ilegal en Chile.
