SANTIAGO.- Dos crisis sanitarias se encuentra enfrentando la comuna de Queilen en Chiloé, donde el hospital suspendió la atención la semana pasada debido al agua contaminada y la Escuela de Chilhué canceló desde ayer las clases a sus alumnos por la presencia de ratones en el recinto.
Así lo constató el diario La Estrella de Chiloé esta mañana, donde se detalló que el centro asistencial, suspendido desde hace cuatro días, lo estará hasta este viernes, cuando la Autoridad Sanitaria entregue los resultados de las mediciones de agua que se encuentra realizando.
Según la directora del establecimiento comunitario, Carolina Silva, "decidimos suspender la atención médica a contar del día viernes 1 de julio como una medida preventiva, ya que no teníamos certeza ni informes concluyentes respecto a la calidad del agua potable que abastece al hospital".
La profesional explicó que a mediados de junio se realizó una sanitización de los estanques del hospital, cuyos resultados arrojaron que el agua de esos depósitos no estaban aptas para el consumo.
Silva informó que hoy esa sanitización será repetida y que "esta semana vamos a tener los resultados de la calidad del agua potable comunal, que es la que abasteció hasta el momento los estanques y que es la que abastece al hospital también".
En tanto, la directora del centro de salud afirmó que "la atención de urgencia funciona de forma normal (...) tenemos personal en SOME que permite recibir todas las interconsultas, las derivaciones y las consultas de especialistas que sean necesarias en Castro; por lo tanto, todas esas atenciones que sean en Castro, Puerto Montt o en la red se están haciendo los contactos y esas horas no se van a perder".
Ratones en la escuela
Con más de 280 alumnos, la Escuela Chilhué se vio obligada a suspender ayer sus clases por la presencia de ratones, hecho que había sido constatado hace 15 días por el descubrimiento de fecas. Durante este tiempo se realizaron más de diez desratizaciones, las cuales no dieron resultados positivos.
Funcionarios del plantes dijeron haber matado más de 30 ratones y algunas capturas sólo durante el día de ayer.
La directora del establecimiento educacional, Karina Vásquez, manifestó que "hay una plaga de ratones a nivel comunal y provincial, muy similar a la que vivimos hace 15 o 20 años atrás".
Durante los días previos, según comentó Vásquez, se continuó con las clases y con la entrega de alimentos a niños ya que las inspecciones de la Autoridad Sanitaria y la Junaeb no detectaron la presencia de roedores vivos.
La directora de la escuela señaló que cuando se detectó que habían ratas vivas en el establecimiento, el alcalde Juan Manuel Godoy y el sostenedor dieron la autorización para suspender las clases.