Los secundarios optaron por no pedir el retiro del proyecto, porque consideran "peligroso" que la reforma se postergue por mucho tiempo más.
El Mercurio (archivo)
SANTIAGO.- Aunque tienen una opinión crítica del proyecto de ley de educación superior, los secundarios de la Cones descartaron pedir que la iniciativa se retire del Congreso y afirmaron que buscarán influir en el contenido del proyecto durante su tramitación, para que recoja las demandas del movimiento estudiantil.
Esta postura difiere con lo planteado, hasta ahora, por la Confech, que era partidaria de que el proyecto de ley no ingresara al Congreso. Aunque, luego de su envío al Parlamento, la agrupación aún no ha definido su estrategia frente a la tramitación.
El vocero de la Cones, José Corona, dijo que consideran que el proyecto es "insuficiente", ya que no fortalece a las universidades del Estado, permite el financiamiento público a universidades privadas y no garantiza un acceso más equitativo a la educación superior.
"Es lamentable que un proyecto tan esperado por la gente se presente tan poco transformador. Hemos tratado de encontrar en el documento dónde está el fortalecimiento a las universidades del Estado y cómo se avanza en un acceso más equitativo a la educación superior. Sin embargo, sólo destaca que universidades privadas tendrán más regulación y más recursos públicos", indicó el dirigente.
Pese a ello, los secundarios decidieron no pedir el retiro del proyecto, sino que influir en su tramitación, ya que consideran "peligroso" que la reforma se postergue por mucho tiempo más, o se debata sin los estudiantes.
"No vamos a permitir que el proyecto se debata sin los estudiantes ni mucho menos vamos a esperar otros 10 años para una reforma. Nuestra generación y las que nos preceden no pueden esperar más. Vamos a dar la pelea para que lo que entró mal termine bien", manifestó Corona.
La decisión de los estudiantes fue adoptada en la sesión plenaria nacional de la Cones, que se realizó este fin de semana.
Los estudiantes también valoraron
la respuesta que les entregó la ministra de Educación, Adriana Delpiano, a su petitorio, aunque dijeron que mantendrán las presiones hasta conseguir avances concretos para establecer un nuevo sistema de financiamiento para los colegios públicos, que reemplace la subvención por asistencia –que se entrega actualmente– por aportes directos a los colegios.
"Sin lugar a dudas hemos avanzado. Nuestros compañeros sienten que la movilización está consiguiendo frutos y que no hemos perdido el tiempo. Ahora queda seguir presionando hasta conseguir nuestro principal objetivo, que es un nuevo sistema de financiamiento", señaló Corona.