SANTIAGO.- Pese a lo mediático de la movilización y el operativo de Fuerzas Especiales de Carabineros, sólo cinco funcionarios de Gendarmería fueron detenidos esta mañana, luego de que se encadenaran a las puertas del ministerio de Justicia.
Así lo informó la policía uniformada, desde donde agregaron que de los 30 efectivos de la Asociación de Funcionarios Penitenciarios (Anfup) que llegaron al edificio ubicado en la calle Morandé 107, frente al Palacio de La Moneda, sólo tres lograron encadenarse.
Ellos fueron arrestados, luego de que los policías lograran cortar las cadenas, mientras que otros dos de los movilizados fueron aprehendidos por oponerse a la acción de Carabineros.
El coronel René Martínez. jefe de la prefectura central norte, informó que hasta el lugar llegó personal de Fuerzas Especiales y no de una comisaría, porque el edificio es un lugar "sensible y cercano a La Moneda".
"Pero personal de Fuerzas Especiales actuó con los protocolos, dialogando primero con las personas y al no detener su actitud procedes a detenerlos y trasladarlos a la unidad", aclaró.
Tras estos desórdenes los efectivos de la Asociación de Funcionarios Penitenciarios (ANFUP), llegaron hasta el Consejo de Defensa del Estado para entregar una carta dirigida a su presidente, Juan Ignacio Piña.
Según explicó el presidente del gremio, Juan Carlos Orellana, que la misiva tiene como objeto de que éste "no se haga parte de la defensa de la Contraloría General de la República", en el caso de las pensiones abultadas en Gendarmería.
"Aquí parece que el Gobierno tiene más interés en la parte monetaria que de sus propios trabajadores penitenciarios", manifestó.
Orellana también se refirió a la movilización que terminó con cinco detenidos esta mañana, señalando que se trataba del "primer plan de acción" de su gremio.
En ese sentido anunció que una vez que conozcan si es que la Corte Suprema no acogerá o no el recurso presentado por ellos contra el dictamen que limitará sus pensiones, "no descartamos nuevas acciones a futuro".
En todo caso dijo que en su gremio confiaban en que la máxima instancia judicial "iba a resolver ajustada a derecho".