SANTIAGO.- Docente universitario, ex administrador municipal y miembro de la directiva nacional del PPD. Esos son parte de los aspectos de la vida profesional y política que detenta el hoy nuevo director nacional de Gendarmería, Jaime Rojas Flores.
El geógrafo titulado de la Universidad de Chile fue nombrado ayer por la ministra de Justicia Javiera Blanco para que se haga cargo de la cuestionada institución penitenciaria, a sólo un día de la renuncia del coronel (r) Tulio Arce.
Con lo anterior se terminó con la tradición de nombrar a un miembro de las filas, que se había iniciado en el gobierno de Sebastián Piñera.
Hasta ayer Rojas Flores era el jefe de la división de Investigaciones del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, es decir era el encargado del desarrollo de la PDI como institución. Una especie de subsecretario. También era el encargado de las tareas de seguridad ciudadana.
Según informa hoy El Mercurio, se lo considera un hombre cercano al ex ministro Francisco Vidal de quien fue su jefe de Gabinete cuando éste fue vocero de Gobierno.
Pero su carrera gubernamental había comenzado en el período del ex presidente Ricardo Lagos, cuando director administrativo de la Subsecretaría de Desarrollo Regional y Administrativo (Subdere) y después trabajó con el actual senador del PPD Felipe Harboe, cuando éste fue subsecretario del Interior.
En paralelo desarrolló una exitosa carrera docente en la Academia Superior de Estudios Policiales de la PDI, a lo que suma diversas cátedras en las universidades de Chile, Central, Academia de Humanismo Cristiano y Andrés Bello, en pregrado y magíster.
Ha sido tildado de "rudo", condición que en La Moneda fue considerada –además de sus atributos profesionales y académicos- a la hora de su elección, pues llega a una institución convulsionada por la crisis que vive en estos días.
De hecho deberá tomar, entre otros temas sensibles, la "papa caliente" que significa el problema del abultamiento de las jubilaciones que destapó el caso de la ex esposa del diputado Osvaldo Andrade, Myriam Olate, que se adjudicó una pensión de 5,2 millones mensuales.
