SANTIAGO.- Las relaciones entre Chile y Bolivia pasan por un momento delicado. Ayer, el ministro de Relaciones Exteriores, Heraldo Muñoz, debió salir al paso de las declaraciones de su par altiplánico, David Choquehuanca, quien dijo estar dispuesto a "derramar sangre" por el río Lauca. "Está yendo demasiado lejos", respondió Muñoz.
Este intercambio de declaraciones ocurre en medio de las dos demandas que enfrentan a ambos países en la Corte Internacional de Justicia de La Haya y la suspensión de la visa diplomática que La Moneda decretó a las autoridades de La Paz.
Considerando que desde Santiago se ha mantenido a Muñoz como vocero, expertos bolivianos estiman que una posibilidad de superar la crisis es un diálogo entre los presidentes Michelle Bachelet y Evo Morales.
El analista político de la Universidad Mayor de San Andrés en La Paz, Franco Gamboa, cree que es necesario dejar de lado estas reacciones "viscerales" y concretar una conversación entre los mandatarios con una posición oficial.
"Creo que el canciller (Choquehuanca) no solo está yendo demasiado lejos, sino que se está precipitando. Estas declaraciones simplemente son perspectivas de una concepción personal de ambos, pero no hay una posición que esté respaldada por los mandatarios", aclaró.
Óscar Alba:
"Choquehuanca está más centrado en lo mediático"
Y agregó que "todavía hay una repercusión de la visita del canciller (a los puertos de Arica y Antofagasta) que generó molestia tanto en la delegación boliviana como en la reacción chilena y eso está todavía intentado apagarse. Entonces creo que si bien son excesivas las declaraciones, por supuesto tenemos que esperar que baje la espuma de la cerveza como se dice vulgarmente, y los presidentes tendrán que expresar poco a poco una perspectiva oficial de Estado y a largo plazo".
Conflicto bélico
En esa línea Gamboa enfatizó en que Bachelet tiene "las credenciales" necesarias que avalan una disposición a conversar, descartando así y pese al tenor de los dichos de Choquehuanca, una posibilidad de conflicto mayor que implique "derramar sangre".
"Hay que evaluar las condiciones dentro de una perspectiva mayor que es la posibilidad objetiva, racional y contundente en la que dos democracias, la democracia chilena y la democracia boliviana, puedan llegar a cualquier tipo de conflicto bélico. Sería imposible, no es una tradición histórica en América Latina (…) por lo tanto creo que ese es el dato objetivo que va a pesar más y reconducir las relaciones democráticas", sostuvo.
Franco Gamboa:
"La CIJ tiene un criterio establecido más racional para tomar decisiones"
"La vocación democrática de la Presidenta Bachelet, su participación como ex alta funcionaria de las Naciones Unidas, siempre ha manifestado concesiones flexibles, democráticas, abiertas y tolerantes. Esos antecedentes son suficientes para estar seguros, tanto la opinión pública boliviana como la chilena, de que jamás las posibilidades hostiles desencadenarían un conflicto mayor", añadió el experto en relaciones internacionales.
Asimismo reconoció que Morales "está consciente del enorme costo político que tiene para su partido y para su imagen personal, el intentar tensionar más las relaciones con Chile": "El Presidente también está seguro de que nuestra demanda en la Corte Internacional de Justicia tiene un peso más estratégico y más contundente que la visita sorpresiva del canciller Choquehuanca con una comitiva".
Choquehuanca Presidenciable
La imagen mediática que está proyectando la autoridad vecina también es analizada en su país. "Al parecer al canciller David Choquehuanca no le importa mucho la diplomacia. Más allá del profesionalismo con el cual se mueven las relaciones de cortesía, la política se construye en base a objetivos, y a raíz de todos los hechos, no estamos ayudando a la vecindad", afirmó en entrevista con La Segunda, el presidente del Instituto de Estudios Internacionales de Bolivia, Óscar Alba.
Y recalcó que "él está más centrado en lo mediático, en que se reproduzcan sus opiniones", situación en la que coincide Franco Gamboa quien resaltó que se está intentando perfilar como el sucesor de Morales.
"Hay gente que cree el canciller sería un recambio importante y han tratado de conseguirle una imagen en el terreno del marketing político, y en eso se enmarca su visibilidad internacional de encabezar la delegación, pero probablemente no ha conseguido los resultados oportunos e importantes que se esperaban", sentenció.
La Haya
Respecto a los litigios que ambos países protagonizan la Corte Internacional, por la demanda marítima, los dos expertos sostienen que este conflicto liderado por los ministros no interferirá en las decisiones de los jueces.
"Aquí hay una controversia más simbólica y mediática entre ambas cancillería que no favorece las relaciones. Y eso uno lo tiene que separar de lo legal, para eso están los litigios en la Corte Internacional", expresó Alba.
"( Los jueces de la CIJ) defienden el contexto global del derecho internacional público de los regímenes internacionales dentro de las posibilidades de paz a largo plazo entre los países, y sin duda este tipo de situaciones que aparecen en cualquier coyuntura, no van a afectar, dado que la Corte tiene un criterio establecido más racional para tomar decisiones", concluyó Gamboa.