Los alumnos sancionados podrán apelar este viernes, a través de una carta.
El Mercurio (archivo)
SANTIAGO.- La Universidad Alberto Hurtado decidió expulsar a tres estudiantes y suspender por un año a otros 22 que participaron en la toma que afectó al plantel en los meses de junio y julio de este año.
De acuerdo a la casa de estudios, la ocupación dejó daños avaluados en $110 millones, incluyendo puertas destrozadas, cámaras de seguridad rotas y siete computadores perdidos.
La decisión de suspender a los alumnos fue adoptada en un sumario que efectuó la universidad. Este viernes los alumnos sancionados podrán apelar a la decisión a través de una carta, informa "La Tercera".
La Federación de Estudiantes del plantel (Feuah) –donde tres de sus cuatro miembros fueron suspendidos, incluyendo al presidente–, la decisión de la universidad es arbitraria. "Se trata de un intento de individualizar procesos colectivos", señaló Alexis González, secretario de comunicaciones, el único de la directiva que no recibió castigo.
El dirigente criticó además que "la única prueba" que utilizó la universidad en el sumario "es un parte de Carabineros del día del desalojo".
La federación anunció que "llegará hasta las últimas instancias para dejar nulo el fallo". Y para mañana ya organizan una marcha.
Ésta no es la primera medida que aplica esa universidad contra los alumnos que participaron en la toma. En julio pasado el plantel cerró el semestre con nota 1 para quienes estaban movilizados y no rindieron los exámenes.
