SANTIAGO.- Un día después de que el Gobierno se comprometiera al pronto envío del proyecto de ley que busca reemplazar la norma vigente sobre migración —Decreto Ley 1.094, de 1975— por una Ley de Migraciones, el director del Departamento de Extranjería, Rodrigo Sandoval, profundizó en la iniciativa en el seminario "Medios y Migración", en el que aprovechó de adelantar detalles sobre el articulado que será ingresado al Parlamento.
El abogado sostuvo que la legislación tendrá tres ejes centrales: la consabida nueva institucionalidad; un nuevo modelo de visas y un enfoque de derechos, consigna "
El Mercurio".
Respecto del primer punto, Sandoval explicó que se propuso una institucionalidad que se haga cargo de la gestión política migratoria y de los trámites.
"Es una propuesta nuestra, que dependa del Ministerio del Interior y que cuente con un órgano ejecutor, que puede ser el servicio nacional de la migración, el departamento de extranjería o una división de migraciones", explicó.
Además, se propuso la creación de un consejo para la política migratoria, que sería un órgano intersectorial en el que participen más ministerios que solo el de Interior, como es hoy.
Acerca del nuevo modelo de visas, Sandoval añadió que "la migración funciona bien en la medida que la respuesta administrativa que tienen los Estados para los modelos de visa converge con la realidad".
Así, la autoridad señaló que se incorporó un formato de corto plazo para una persona que venga a buscar trabajo.
"Tenemos que asegurar que las personas tengan una respuesta administrativa, con condicionantes, plazos más acotados, garantías, pero tiene que existir la voluntad (…) De lo contrario, esa persona va a mal utilizar otro formato para ingresar", sostuvo.
El tercer planteamiento, en tanto, dice relación con un enfoque de derechos. "Las distintas normativas no se hacen cargo de un debido proceso en materia sancionatoria. Lo que nosotros terminamos haciendo es abrir la puerta del activismo judicial, que es muy mal visto, pero que muchas veces da cuenta de una falta que tiene la normativa de hacerse cargo de ciertos temas", apuntó.
Sandoval afirmó que el problema sobre la actual normativa radica en su rigidez, especialmente por la disposición de visas que tiene, lo que el Gobierno —resaltó— ha flexibilizado con una serie de decretos.
"La nueva ley de migraciones es un marco normativo que empodera y entrega atribuciones claras a una institucionalidad que se haga cargo de la gestión política migratoria, de los procesos de regularización y de los trámites administrativos de las personas que se encuentran en el territorio nacional", sostuvo el abogado.
En el seminario, Sandoval negó que "Chile esté lleno de extranjeros", pues agregó que el país no cuenta con más de un 3% de población migrante en relación al total nacional, realidad que contrasta con la de naciones OCDE, donde el 13% de su población total es foránea, detalló.
"Repito lo que dijo el subsecretario de Interior, Mahmud Aleuy: el Gobierno mantiene su compromiso de presentar un proyecto de ley de migraciones, que no es un proyecto nuevo y que es un buen proyecto. Aquí lo que se tiene que asegurar es que exista en el Congreso Nacional la discusión que necesita Chile para comprender la migración en el país. El resto es challa", manifestó.
