La familia de Ignacio espera tenerlo de vuelta en casa antes de Navidad.
@CEspinozaQ
SANTIAGO.- Ignacio Pérez (6 años) fue trasplantado de hígado hace dos semanas, gracias a la donación que hizo su propio papá ante la ausencia de un órgano de un niño. Hoy el equipo médico que lo trata informó que el menor "evoluciona favorablemente".
El doctor Franco Innocenti, jefe de Trasplante de la Clínica Sanatorio Alemán de Concepción, dijo que "está evolucionando favorablemente, aunque aún requiriendo ajuste en la inmunosupresión de su tratamiento y a la espera de que se realicen algunos exámenes".
Explicó que la mayoría de éstos "está donde queremos, pero hay algunos detalles que todavía faltan antes de que se vaya de alta. Pero, en general, la evolución ha sido satisfactoria".
Ignacio sufrió una hepatitis fulminante y su salud se agravó a tal nivel que lo convirtió en prioridad nacional para trasplante. Allí, cuando la espera ya no podía extenderse, su papá Eduardo entró a pabellón para sacarse parte del órgano que necesitaba con urgencia su hijo.
El hombre, que dice no ser un héroe, habló con el diario El Sur de Concepción, donde reveló que su esposa y madre de Ignacio sería la donante. Sin embargo, el equipo médico consideró que era mejor que fuera él para que ella acompañara al niño, después de la intervención quirúrgica que se extendió por 11 horas.
Eduardo pidió cambios a la legislación sobre donación de órganos: "Yo soy donante, pero mi autorización en vida no sirve de nada, porque sigue siendo la familia la que decide si se entrega o no mi cuerpo como donante de órganos", manifestó.
Se espera que el alta de Ignacio sea antes de Navidad. Sin duda, un buen regalo de fin de año para esta familia de la Región del Biobio.