SANTIAGO.- Comidas distintas, bebidas y tradiciones distintas. Las costumbres de fin de año que las distintas comunidades de extranjeros en Chile tienen varían en muchos sentidos, aunque todos tienen en común que, sobre todo para estas fechas, extrañan profundamente sus patrias.
Aquí te mostramos ejemplos de algunas de las comunidades extranjeras presentes en el país:
“(En Navidad) invitamos a nuestra mesa al que no me puede invitar a mí”, explicó Antya Batista, presidenta de la comunidad de dominicanos en Chile y que lleva seis años en el país. “Compartimos nuestra mesa con el más humilde”, señaló en entrevista con El Mercurio. “Yo este año voy a recibir a tres familias en mi casa; así celebraremos en Santiago”.
Según explicó Bastidas en la nota publicada este domingo, jornada en que se celebra el Día Internacional del Migrante, para la cena de Nochebuena, en su casa se comerá lo típico dominicano: un lechón asado al palo, pollo a las brasas, ensalada mixta y moro con gandules (especie de poroto) con coco. Su cola de mono se llama Crema de Oro, y es un ponche hecho a base de alcohol, leche, huevo y azúcar.
Perú, el panetón y el muñeco
“Para la Navidad generalmente se junta la familia, se come panetón (queque inspirado en el panettone italiano) y se toma una taza de chocolate caliente”, cuenta Daniel Jiménez, administrador del blog “Peruanos en Chile”.
Tal como señaló, en Nochebuena, después de cenar, la celebración se transforma en una fiesta, donde “se toma y se baila hasta la madrugada”.
A diferencia de Chile, donde los cohetes y estrellitas están prohibidos en su uso hogareño, en Perú la pirotecnia es común tanto en Navidad como en Año Nuevo. Asimismo, se suele destruir o quemar un muñeco que represente a algún personaje polémico o desagradable.
El Año Viejo
Mientras Óscar Alzate, quien lleva tres años en Chile, recuerda como “la rumba no para” en Colombia a partir del 16 de diciembre hasta Año Nuevo; Tatiana Albija, ecuatoriana y presidenta del Consejo Consultivo Nacional de Migraciones de la sociedad civil, recuerda que en su país, durante los 9 días previos a la Navidad, se hace la Novena del Niño Jesús.
“Uno va por cada casa rezando (…) Se lleva al Niño Jesús. El 31 de diciembre celebramos el Año Viejo. Hacemos un muñeco que va a representar el año que se va y todas las cosas negativas que a uno le pueden pasar. También hacemos testamentos y los quemamos”, explicó, agregando que la comunidad ecuatoriana tiene pensado hacer una fiesta en conjunto para despedir el 2016 en Chile.
Cartas al Niño Jesús
En Venezuela, al ritmo de las gaitas, las fiestas de fin de año se acompañan de hallacas (especie de humita con carne o pollo), pan de jamón y ensalada de gallina. Y los niños no le escriben al Viejito Pascuero o a Santa Claus, sino que al Niño Jesús, explicó Yonaima Bermúdez, de Caracas.