SANTIAGO.- Cada vez menos chilenos están rechazando la idea de ser donantes de órganos, según se desprende de la evolución que ha experimentado el listado de no donantes que administra el Registro Civil, el cual contiene las solicitudes de personas que expresaron ante notaría que no quieren ser partícipes de trasplantes.
El registro existe desde octubre de 2013 —cuando se estableció el trámite ante notaría— y hoy suma 11.095 personas. Sin embargo, el ritmo anual de inscripción es cada vez más reducido: mientras en 2014 ingresaron 4.062 personas, el año pasado fueron 1.090, la cifra más baja. De esta manera, poco a poco el listado se va estancando, señala "
El Mercurio".
Las organizaciones que promueven las donaciones aplauden esta tendencia. La presidenta de la Corporación del Trasplante, Anamaría Arriagada, la atribuye a las campañas comunicacionales realizadas en el último año, en especial una televisiva de Mega, las que ayudaron a concientizar a la ciudadanía.
Además, cree que existía un temor a ser donante que se ha ido reduciendo. "Inicialmente, cuando fue el cambio que implicaba ir a la notaría, hubo una contrarreacción de la gente, porque la ley fue un poco forzosa en su promulgación y la gente la vio de forma violenta", explica.
Según Arriagada, "la donación no pasa tanto por los cambios legales, sino por un cambio cultural y valórico", que es lo que estaría pasando.
Diego Palomino, vocero de Cambiemos la Historia, organización que apoya a familias que están en búsqueda de órganos, también cree que las campañas comunicacionales explican el descenso en el rechazo.
"Hemos puesto propaganda en los buses del Transantiago, donde llamamos a conversar el tema en familia, porque es ahí donde se pierden muchos donantes, cuando en un momento de shock por la muerte de alguien, la familia toma la decisión de no donar, lo que no conversó previamente", comenta.
La noticia es aún mejor, dice Palomino, si se considera que los donantes subieron 8% en el primer semestre del año pasado. Sin embargo, advierte que la tarea por concientizar aún no ha terminado.
"Aún estamos lejos de Uruguay, que es el país de la región con la mayor tasa de donantes por habitantes (16,6 por millón de personas, versus la de 6,7 en Chile), pero estamos avanzando de a poco", dice.
Lo mismo cree Anamaría Arriagada, quien alerta que como la población está cambiando, se necesitan más donantes que antes. "Antes, el perfil epidemiológico de las personas donantes era el de jóvenes que morían por un TEC (traumatismo encefálico). Ahora son de mayor edad y su causa de muerte se asocia a hipertensión o malformaciones vasculares, con enfermedades como obesidad o diabetes, y no se pueden usar los hígados o riñones", explica.
En todo caso, dice que las cifras muestran un avance y que incluso en estos meses se ha visto un aumento en las donaciones. "La gente está tomando decisiones ya no motivadas por una ley, sino que en base a información responsable", comenta.