SANTIAGO.- Esta mañana, el Seremi de Salud de la Región Metropolitana, Carlos Aranda, realizó la fiscalización de algunos recintos de comida, ubicados en el Barrio República. En 2016, la inspección dejó como resultado 41 recintos con prohibición de funcionamiento.
El seremi explicó que el objetivo de la inspección es verificar que los restaurantes del sector universitario cumplan con las condiciones sanitarias para evitar intoxicaciones o enfermedades de transmisión alimentaria (ETA).
Durante el año pasado, la Seremi de Salud fiscalizó tres mil de estos establecimientos en la Región Metropolitana e iniciaron 386 sumarios. Además, registraron 268 brotes de infecciones, que afectaron a 1.255 personas de las cuales 49 necesitaron hospitalización: la mitad por enfermedades producidas por salmonella.
Ante esto, Aranda aseguró que es muy importante que sean los mismos consumidores los que fiscalicen estos recintos. "Deben fijarse en que tengan autorización sanitaria, buenas condiciones de aseo, la persona que vende el producto no lo maneje directamente o que los alimentos estén refrigerados. Hemos encontrado lugares que no cuentan con agua caliente o permiso para la venta de alimentos elaborados".
Además, la autoridad sanitaria reiteró que el bajo -o nulo- aporte nutricional de los alimentos que comercializan estos recintos puede afectar el rendimiento académico de los universitarios, quienes consumen diariamente los productos. "No hay minerales, sólo grasas saturadas y los almuerzos deben ser balanceados (...) Si no hay una alimentación saludable, sufrirán de cansancio generalizado, que afectará su concentración", aseguró.