Los acuerdos entre estos apoderados coinciden en la necesidad de erradicar la denominada "previa", cuando los adolescentes se reúnen —muchas veces para beber alcohol— antes de la fiesta a la que asistirán. Eso ayudaría, además, a que los "carretes" terminen más temprano.
Cristián Carvallo, El Mercurio
SANTIAGO.- Los apoderados de los colegios Los Andes y Tabancura se sumaron ayer a una tendencia que comenzó hace algunos años en The Grange School y que ya cuenta con el apoyo de varios establecimientos de la zona oriente de Santiago, para que los padres asuman un rol más activo en la supervisión de las fiestas de sus hijos y ayuden a que estas transcurran en ambientes más sanos y seguros, acordes con sus edades.
Juan Pablo Correa y Paul de La Taille, presidentes de los centros de padres de los colegios Los Andes y Tabancura, respectivamente, enviaron una nota a los apoderados para dar cuenta de su adhesión a un protocolo de acuerdo sobre las actividades de esparcimiento extraescolar, señala "
El Mercurio".
"Nos juntamos los seis colegios (The Grange School, Everest, Villa María, Verbo Divino, Tabancura y Los Andes) tomando como base el acuerdo del The Grange School (...) y la idea es que cada uno implemente este protocolo en su colegio", explica Correa. "El objetivo es controlar la entrada a las fiestas y que no se consuma alcohol", agrega.
Es la droga principal
El protocolo apunta a "la necesidad imperiosa de que los papás nos hagamos cargo de la manera en que se llevan a cabo las salidas de nuestros hijos/as, con los riesgos, desafíos y oportunidades que estas conllevan".
Su contenido aborda temas como horarios, traslados, consumo de alcohol y responsabilidades del anfitrión.
Según el XI Estudio Nacional de Drogas en Población Escolar, publicado en diciembre por el Servicio Nacional de Rehabilitación del Consumo de Drogas yAlcohol (Senda) —que consultó a 18 mil alumnos de colegios municipales, subvencionados y particulares—, el alcohol es la droga de mayor prevalencia y consumo entre los escolares, con un 35,6%, seguida de la marihuana (34,2%).
Además, uno de cada tres alumnos de 8º básico a 4º medio declaró haber consumido alcohol el último mes, y el 63% admitió haberse embriagado.
De acuerdo con el Senda, en promedio los escolares chilenos comienzan a beber alcohol a los 13 años de edad.
Según especialistas, el mayor problema es que los adolescentes tienen escasa capacidad de moderación, pues la parte del cerebro que está a cargo del criterio, de medir consecuencias y de tomar decisiones aún está inmadura, ya que recién se consolida después de los 20 años.
Con todo, los apoderados también apuntan al rol que ellos mismos deben cumplir en la crianza.
"Aquí no estamos buscando una cosa normativa, sino que de conversación (…) Lo que estamos tratando es que se formen, y la formación implica conversar. Que entiendan que como papás estamos buscando el bien para ellos", asegura el presidente de los apoderados del Colegio Los Andes.
"Estamos tratando de cambiar. Esto no será un cambio inmediato (...) Costará meses y quizá años, pero la idea es hoy darle el punto de inflexión, volver a la sensatez", agrega.
De la Taille señala que están promoviendo que más establecimientos de la capital y de regiones adhieran al protocolo. Según Correa, la meta es "llegar a 50 colegios a fin de semestre".