VALPARAÍSO.- El Senado comenzó el martes la discusión de las indicaciones del proyecto que reconoce y da protección al derecho a la identidad de género, el que tiene como aspecto fundamental el que permitirá a las personas realizar el cambio en la inscripción en el Registro Civil cuando se considere que la identidad no es congruente con el género del solicitante.
Además, la iniciativa que se tramita sin urgencia desde hace cuatro años en el Congreso por iniciativa de los senadores Lily Pérez (Amplitud), Ximena Rincón (DC), Camilo Escalona (PS) Ricardo Lagos Weber (PPD) y Juan Pablo Letelier (PS), permitirá que esto se realice a través de un trámite expedito y sin mayores consultas.
Sin embargo, el debate no ha sido sencillo. De hecho existe una alta posibilidad que hoy tampoco se despache en su totalidad, ya que todos los parlamentarios han querido intervenir en cada una de las 14 indicaciones que se discuten.
El proyecto por ejemplo, llegó a la Sala con un gran cambio en función de lo que era el original, y es que la modificación de nombres y sexo en el Registro Civil solo será permitida para los mayores de 18 años. Mientras que anteriormente se habían considerado mecanismos para los menores según su edad.
Así también contempla que la modificación en el certificado de nacimiento, deberá notificarse a terceros, como cónyuge o hijos, quienes podrán oponerse e impugnar ante la justicia. Este articulado es el que genera más rechazo entre las organizaciones que defienden la diversidad sexual.
"La pregunta es: en qué afecta al resto de los seres humanos lo que yo hago con mi identidad. Con qué derecho se meten conmigo y el ejercicio de mi identidad. Esa es la discusión de fondo", dijo el senador Letelier.
En las exposiciones de la sesión de ayer destacaron por ejemplo la de la senadora Pérez, quien llamó a rechazar todas las indicaciones que apunten a que médicamente deba demostrarse la transexualidad.
Por su parte, el senador Carlos Bianchi (IND) señaló que esto puede generar inconvenientes cuando la persona desee jubilarse o incluso en aquellos que son deportistas.
"Quiero recordar que el sexo en nuestra legislación es un atributo de una persona y cambiarlo produce consecuencias muy complejas en el ámbito civil, provisional, comercial, penal, no solo respecto de la persona misma, sino de terceros, porque pueden generar impacto patrimonial", sostuvo el senador Hernán Larraín (UDI).
