SANTIAGO.- Una buena noticia recibieron ayer los habitantes de la Provincia del Ñuble: su aspiración de separarse administrativa y políticamente de la Región del Biobío se hizo realidad luego de que el Senado aprobara este miércoles con 26 votos a favor y dos en contra la creación de la nueva Región de Ñuble.
Fueron más de cuatro años de intensos llamados y gestiones por parte de las autoridades de ese sector para lograr su cometido y en el plazo de un año ya podrán ver a la nueva región operativa y con todas sus autoridades correspondientes.
La XVI Región del Ñuble tendrá tres provincias -Diguillín, Punilla e Itata-, divididas en 19 comunas: Chillán, Chillán Viejo, Quillón, Bulnes, San Ignacio, El Carmen, Pinto, Pemuco, Yungay, San Carlos, Coihueco, San Nicolás, Quirihue, Cobquecura, Ninhue, Treguaco, Coelemu, Portezuelo y Ránquil. Su capital regional será la ciudad de Chillán.
Según el texto del proyecto de ley, el motivo de la separación del Ñuble se debe a una necesidad de sus habitantes, quienes consideran que tienen "dinámicas culturales y espaciales muy distintas a las de su actual capital regional, ubicada en la ciudad de Concepción, en la Región del Biobío".
No obstante, Ñuble no es la única zona del país con aspiraciones de independencia. La Provincia de Aconcagua y la zona sur del Maule también advierten diferencias con las regiones que las acunan.
Aconcagua
El llamado de Aconcagua de convertirse en su propia región y separarse de lo que es la Región de Valparaíso también data de hace años. No es una decisión fácil, ya que esta zona interior aporta el 74,6% del PIB regional.
En 2016, la Subsecretaría de Desarrollo Regional y Administrativo (Subdere) anunció el comienzo de la licitación para realizar un estudio durante ese año para determinar la viabilidad de crear una nueva Región de Aconcagua. La iniciativa tenía como base un compromiso de campaña de Michelle Bachelet de iniciar esos estudios durante su administración.
En ese entonces, el diputado de la zona, Marco Antonio Núñez (PPD), reafirmó su convencimiento de que "tenemos la historia, los recursos y la viabilidad política y económica para poder construir una región nueva, distinta y en la que se acoja este anhelo de todos sus habitantes".
De hecho, en junio de este año, mientras el candidato presidencial Alejandro Guillier visitó la zona en el marco de su campaña, sentenció que si estos estudios de factibilidad dan positivos y él resulta ser el próximo Presidente de Chile, "se crea la Región de Aconcagua".
"Es un compromiso, pero tengo que ver el proyecto, porque tiene que tener varias condiciones, uno es que tenga sustentabilidad económica, dos, que sea una unidad administrativa, tres, que la población quiera y otro que haya una identidad cultural, lo que creo que se da aquí porque la cultura de la Quinta Costa es muy distinta a la región interior, en eso estamos de acuerdo", manifestó.
Tras la aprobación de la creación de la Región del Ñuble, el Gobierno aseguró que la próxima zona que sigue en carpeta es la de Aconcagua, para la que espera iniciar su tramitación antes de que termine esta administración.
Maule Sur
En etapa de estudio en la Subdere también se encuentra el proyecto de separar la actual Región del Maule en dos, norte y sur, luego de que el diputado Romilio Gutiérrez (UDI) le solicitara este análisis en 2016 al ministro del Interior, Mario Fernández.
"Hay grandes diferencias con el Maule Norte, nosotros vemos que estamos en desventaja en la asignación de recursos y otros aspectos, por lo tanto, le hemos planteado al ministro esta posibilidad de crear la nueva Región de Maule Sur", señaló en la ocasión el diputado.
La idea de la división surge de parte de las Provincias de Linares y Cauquenes, cuyos habitantes sienten un desmedro de su zona en favor de las grandes ciudades de Curicó y Talca. Además, argumentan que esta separación ya se da en el plano parlamentario, dadas las grandes diferencias que hay entre el Maule Norte y el Maule Sur.
