SANTIAGO.- Con el mayor acceso a tratamiento, el VIH pasó de ser una enfermedad mortal a poder manejarse como si fuera una crónica. Lo negativo de ello es que "puede existir un relajo de la población" respecto de la prevención, según la ministra de Salud, Carmen Castillo.
Y prueba de ello podrían ser las últimas cifras recabadas por la Asociación de Isapres para el período 2014-2016, que muestran que la cantidad de pacientes asegurados por el sector privado que se incorporan a tratamiento contra el VIH está aumentando en cerca de mil cada año, llegando a 7.388 en total en 2016.
Lo anterior muestra un crecimiento de 19% cada año, por encima del aumento a nivel nacional de nuevos casos de VIH, que, según el último informe de Onusida, es de 10%. Ese reporte, además, situó a Chile como el país de América Latina donde más crecieron los nuevos casos entre 2010 y 2016, con un alza de 34%.
Las cifras de las aseguradoras privadas muestran que entre 2014 y 2016 la cantidad de prestaciones otorgadas para tratamiento de VIH crecieron 64% (en 2016 fueron 187 mil atenciones) y el gasto en el mismo período aumentó 47% real, superando los $39 mil millones el año pasado. "El VIH es el problema de salud de mayor gasto en isapres entre las coberturas del plan AUGE", sostuvo Gonzalo Simón, gerente de desarrollo de la Asociación de Isapres.
La nueva campaña contra el VIH que el Gobierno lanzará en agosto "incluye también a otras enfermedades de transmisión sexual que hay que ponerlas en el tapete", dijo el subsecretario de Salud Pública, Jaime Burrows. En ella se insistirá en el uso del preservativo como principal método de prevención de contagios y en la realización del examen de diagnóstico.