Cristián Carvallo, El Mercurio
SANTIAGO.- Con molestia reaccionaron los parlamentarios que asistieron a la cuarta subcomisión mixta de Presupuestos, al escuchar la exposición de la policía uniformada en la primera etapa de discusión del erario de 2018 para la institución.
La discusión se da en la crisis por la malversación de $25 mil millones —y que está siendo indagada por la Fiscalía— pero también de la dificultad para llenar 6.853 vacantes en la institución.
El general director (s) Marcos Tello —si bien transmitió que "está todo funcionando con normalidad" después del fraude— explicó que en los últimos 10 años "los desvíos de recursos se realizaron desde las cuentas de gasto en personal y de desahucio".
Y, sobre la primera cuenta, el oficial comentó que si bien "no es una información que esté confirmada porque es parte del proceso investigativo (de la fiscalía)", afirmó que "de lo que nosotros pudimos establecer, es fundamentalmente de aquellas plazas que fueron asignadas a la institución y que por diversas razones no se ocuparon".
La declaraciones en la edición de hoy de
El Mercurio.