SANTIAGO.- El fiscal jefe de Rancagua Sergio Moya, quien está a cargo del caso Caval, anunció que se podría abrir una nueva arista en la investigación, luego de que Mauricio Valero denunciara al hijo de la Presidenta Michelle Bachelet, Sebastián Dávalos, realizaba asesorías mientras estaba en el Gobierno.
Según informó radio Cooperativa, el persecutor explicó que "la semana pasada, el imputado Valero pidió prestar declaración. Él tiene derecho a declarar en todas las instancias del procedimiento, nosotros recogimos su testimonio y eso puede motivar una nueva diligencia y eso está en curso".
"La semana pasada, el imputado Valero pidió prestar declaración. Él tiene derecho a declarar en todas las instancias del procedimiento, nosotros recogimos su testimonio y eso puede motivar una nueva diligencia y eso está en curso"
Sergio Moya fiscal jefe de Rancagua
La primera información sobre el ex director Sociocultural de La Moneda, apareció en El Mercurio durante el fin de semana.
En su declaración, Valero dijo no haber declarado antes contra Dávalos por temor a represalias.
Asimismo, reveló al Ministerio Público que Dávalos emitió boletas por más de 10 millones de pesos, en 2012, cuando era funcionario de la Dirección General de Relaciones Económicas Internacionales (Direcon), dependiente del Ministerio de Relaciones Exteriores.
"Estas boletas son emitidas por Sebastián Dávalos, y dicen relación con asesorías comunicacionales, pero debo aclarar que las mismas no corresponden a la asesoría que en ella se expresa. Natalia Compagnon decidió que su marido emitiera boletas con dicha 'glosa' por los trabajos que efectuaba para Gonzalo Vial, ya que él aún se desempeñaba en un cargo de Gobierno; y, según ella, consideraba que una asesoría comunicacional no implicaba una transgresión administrativa", sostiene en su relato judicial.
Pese a lo anterior, el empresario aseguró que lo mencionado "no me consta porque no tengo conocimiento en materia administrativa, pues yo nunca he trabajado para el Estado u organismos públicos".
El ex socio de Natalia Compagnon, añadió que la esposa de Dávalos le ratificó que por esos informe "no cobraba y cuyo único objeto era asegurar la fidelización del cliente, motivo por el cual me desocupé de su confección y entrega".