SANTIAGO.- Con el 54% de los votos, Sebastián Piñera se convirtió este domingo en el nuevo Presidente de Chile, llegando así por segunda vez a La Moneda, tal como lo hizo en 2010. Ya desde mucho antes incluso que confirmara su postulación, el Mandatario electo se alzaba como la figura mejor posicionada de Chile Vamos en las encuestas y en julio se impuso en las primarias de su sector.
Pero el camino que trajo de regreso a Piñera, comenzó a prefigurarse en 2016 cuando en el mes de julio partió con un despliegue a lo largo del país para dar a conocer el libro "La historia se escribe hacia adelante" de Mauricio Rojas. Obra centrado en su primera administración y que buscaba recordar su legado. Fue el primer paso, pese a que durante meses evitó confirmar sus anhelos.
"No es tiempo hoy de candidaturas presidenciales", decía el en ese entonces ex Mandatario, a la vez que llamaba a poner el foco en las municipales de ese año. Comicios en los cuales también jugó un rol relevante al apoyar a los candidatos a concejales y a alcaldes del bloque, mediante salidas a terreno y viajes a regiones. Chile Vamos obtuvo una importarte votación, derrotando a la Nueva Mayoría en comunas clave, como Santiago y Maipú.
Ese despliegue fue complementado con otras giras por regiones,que sirvieron de plataforma para comenzar a cimentar su aterrizaje como candidato. Además, le permitieron estar vigente y opinando de la coyuntura del país, lo que incluía duros diagnósticos del desempeño del gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet.
Candidatura a primarias
Antes de que finalizara el año, el PRI decidió proclamarlo como su abanderado a pesar de no haber confirmado todavía su postulación. El gesto aunque adelantado, daba cuenta del ambiente al interior del bloque, donde varios dirigentes calificaban como un "secreto a voces", la intención de Piñera de competir.
De hecho, en los meses de verano se fue instalando en los partidos la idea de que él era la única opción para vencer a la Nueva Mayoría y tanto en RN como en la UDI, se fue pavimentando la ruta para asegurarle sus apoyos.
Cuando ya comenzaba a aclararse un poco más el panorama oficialista, Piñera irrumpe en el mapa electoral lanzando su candidatura presidencial el 21 de marzo pasado. Acompañado de su familia, dirigentes de partidos y personajes de la sociedad civil, confirma su decisión de repostular a la Presidencia en un acto masivo en la explanada del Museo de Historia Natural del Parque Quinta Normal, en Santiago.
Teniendo a su favor los apoyos de RN, la UDI y el PRI, se mostró partidario de someterse a la institucionalidad de Chile Vamos y fue a primarias legales. Ley por lo demás promulgada durante su primer mandato.
En el intertanto, Piñera se comprometió a ir "más allá de la ley" en lo que se refería a desligarse de sus negocios, cumpliendo con su declaración de patrimonio e intereses y adoptando algunas medidas. La creación de un fideicomiso ciego a nivel nacional y en el extranjero y el desligarse de la administración de sociedades, junto a otros gestos de su familia, estuvieron entre éstas.
Finalmente, tuvo que medirse en las urnas con el senador Manuel José Ossandón y el diputado de Evópoli, Felipe Kast, triunfando el pasado 2 de julio con un 57% de los votos, pasando a convertirse en el candidato único del conglomerado.
El foco en el centro político
Durante gran parte de la campaña, la candidatura de Piñera fue acusada de estar más a la derecha, esto debido a sus posturas por temas valóricos como el aborto, el matrimonio igualitario y la adopción homoparental.
Sin embargo, con los meses la estrategia fue apuntando en gran medida a llegar al centro político y captar su apoyo no sólo con la incorporación de figuras ex concertacionistas y miembros del partido Ciudadanos -del ex ministro Andrés Velasco-, sino que por los temas sobre la mesa.
De este modo, parte importante del foco estuvo puesto en medidas que favorecieran a la clase media como, por ejemplo, la creación de una red de protección para ellos o bien de un Ministerio de la Familia y Desarrollo Social, que apuntan a cuidar sus intereses.
El rol de Cecilia Morel y sus hijos
De gran relevancia fue también el papel que jugaron su esposa Cecilia Morel y sus hijos Magdalena, Cecilia, Sebastián y Cristóbal, en la campaña. En el caso de la ex Primera Dama fue un pilar fundamental, acompañando a su marido en actividades, pero también teniendo su propia agenda para acercarse a los votantes.
Mientras que sus hijos llegaron a reforzar la última etapa del balotaje, ayudando a convocar a nuevos grupos como el centro político y abordando ciertos tópicos con más libertad que su padre. Esto pues se declararon abiertos a avanzar en los denominados temas valóricos e incluso partidarios de varias causas.
A la vez que adquirieron una mayor presencia territorial, saliendo a terreno para llegar a los lugares en que Piñera tal vez no podría estar.
Apoyo de los contendores
En su cierre de campaña del pasado jueves, Piñera agradeció el apoyo de sus contendores Felipe Kast (Evópoli), Manuel José Ossandón (RN) y José Antonio Kast (IND), quienes a pesar de haber competido con él, se cuadraron posteriormente con su opción.
El primero en hacerlo tras la primaria fue Felipe Kast, quien incluso se convirtió en vocero de su campaña presidencial, cobrando un rol importante en la última fase. Esto también implicó el respaldo de su partido Evópoli, cuya gente se volcó a trabajar por Piñera, llevando sus propuestas a la candidatura.
La misma noche de la primera vuelta del pasado 19 de noviembre, fue el turno del diputado José Antonio Kast, quien no sólo le entregó su respaldo, sino que además se puso a recorrer el país para asegurar su opción.
El último en sumarse fue el senador Ossandón, quien luego de concretar el pasado 22 de noviembre un encuentro entre ambos, oficializó al día siguiente su respaldo. Desde entonces, el legislador acompañó a Piñera en actividades públicas e hizo activamente campaña por él.
Apertura ante la gratuidad
Cabe recordar, que el apoyo de Ossandón se produjo luego del compromiso de Piñera de avanzar en algunos temas como la gratuidad en la educación, poniendo énfasis en el área técnico profesional.
Postura considera desde el oficialismo como una "vuelta de carnero" del ex candidato, pero que buscaba también acercarlo a otros sectores como aquellos que apoyaron al ex alcalde de Puente Alto.